Tour

Alpe D’Huez aclara el podio

Vingegaard resiste a Pogaçar y Geraint Thomas, que sale de los Alpes como el tercero en discordia de este Tour

Pogacar, Vingegaard y Geraint Thomas llegaron juntos a la cima del Alpe d'Huez
Pogacar, Vingegaard y Geraint Thomas llegaron juntos a la cima del Alpe d'HuezThibault CamusAgencia AP

El podio del Tour de Francia se empieza a aclarar, y Alpe D’Huez ha dejado una prueba de ello. A día de hoy hay tres ciclistas que están por encima del resto: Jonas Vingegaard, Tadej Pogaçar y, un par de escalones por debajo, Geraint Thomas. Todavía queda carrera, pero de momento los dos primeros han demostrado estar por encima de los demás. Y, en cuanto a Thomas, un ganador del Tour no es alguien con quien se pueda acabar a la ligera.

Es cierto que, cuando el líder y su inmediato perseguidor -ahora vestido de blanco por ser el mejor joven de la carrera- aceleraban el ritmo, Thomas se quedaba unos metros detrás. Pero con la fuerza suficiente como para volver a enganchar con ellos después. Y así estuvo los últimos cinco kilómetros del coloso alpino haciendo la goma.

Porque quizá esperábamos más fuego después del destrozo presenciado el miércoles, pero lo cierto es que la etapa se quedó un poco corta de ataques entre los grandes de la general. Tampoco hizo mucha falta. Antes de que Pogaçar -prometió venganza e intentar recuperar el amarillo hasta el último día- arrancase en Alpe D’Huez, ya apenas quedaban los tres capos de la general. Bardet, que en la jornada anterior se puso segundo en la general, ya había cedido.

Fuera de los hombres del podio sólo aguantaban Sepp Kuss -el norteamericano es tan buen escalador como irregular- para hacer de escudero de Vingegaard… y Enric Mas. Ya nunca sabremos qué pasaría si no se hubiese hundido en el Galibier, pero lo cierto es que en la última etapa alpina el ciclista español mostró el nivel que se le esperaba antes de tomar la salida en Copenhague. Gracias a su buena etapa -al final se dejó unos segundos con los jefes- subió un puesto y ahora es noveno en la general. Todavía queda tela por cortar.

Pidcock se estrena

La verdad es que el desarrollo de la jornada fue bastante más ‘normal’ que la locura que se vivió el miércoles. Una fuga relativamente numerosa que logró un máximo de siete minutos y un pelotón que, realmente, en la Croix de Fer todavía tenía más de 120 integrantes hasta que el Jumbo-Visma decidió que ya bastaba de paseos.

Esta vez no hubo presencia española en la fuga. Sí entró un Tom Pidcock que el día anterior había sufrido muchísimo tanto en Galibier como Granon y, aun así, tiró de casta para no alejarse demasiado en ninguna de las dos subidas. Jovencísima estrella del ciclocross pasada a la carretera, como Van Aert o Van der Poel, el británico de 22 años se metió en el corte inicial y después hizo todo lo demás.

Seleccionó la fuga en la Croix de Fer hasta dejarla en cinco componentes. Y luego los remató a todos en Alpe D’Huez para inscribir su nombre en la mítica cima alpina y hacerlo además con el honor de ser el ganador más joven en los 70 años de historia y las 30 veces que se ha subido este puerto. Su nombre será inscrito en la curva 12, casi a mitad de las 21 que presenta la subida. Cerca de donde, con su definitivo ataque, acabó por sacar de rueda a Louis Meintjes y a Chris Froome.

Porque, sí, el veteranísimo corredor británico estuvo también en la escapada y realizó una más que meritoria etapa. Insuficiente para ganar pero, después de todo lo que ha sufrido durante los últimos años, al menos estará satisfecho con el papel realizado. Cuatro Tours le avalan y dos veces subió este puerto vestido de amarillo. Aquellos tiempos ya pasaron pero, a los 37 años y con dos temporadas en las que pareció que no recuperaría jamás un nivel competitivo, Alpe D’Huez debe servirle para comprobar que todavía puede hacer cosas bonitas en el ciclismo. Acaba contrato a final de temporada.

Los Alpes han mostrado muchas cosas. Entre otras, que todavía queda carrera. Pogaçar entró como jefe del Tour y sale como la principal amenaza para Vingegaard. Thomas está muy bien, pero le falta un escalón que tal vez alcance en la tercera semana, más fondista como es por mor de la edad. Sigue habiendo interrogantes como Bardet, que hizo medio Giro y eso debe notarse en los últimos días, la progresión de Gaudu y Yates o un Nairo Quintana que este jueves fue ya menos consistente. Pero, en esencia, el Tour parece tener ahora un guion más claro.