FC Barcelona

F. C. Barcelona

Desastre azulgrana en balaídos

La Razón
La RazónLa Razón

No se salva nadie empezando por Luis Enrique. Otra vez las malditas rotaciones condenan al Barcelona. No se puede prescindir de Iniesta y Rakitic en un partido que se presumía tan peligroso de antemano. El técnico estaba avisado, sabía perfectamente cómo le iba a jugar el Celta, sin embargo decidió plantearlo como si fuera un partido cómodo. Déjate de pensar en las selecciones, Lucho. Tras el empate del Madrid había que ganar como fuera y por tus decisiones se dejó escapar una oportunidad de oro para recuperar el liderato. Sin Messi hay que poner a los mejores e Iniesta es demasiado bueno para dejarle en el banquillo. Basta de ataques de entrenador. Tienes una plantilla amplia y quieres tener contentos a todos, pero te estás equivocando mucho últimamente.

Reacción en vano

El entrenador quiso arreglarlo en la segunda parte y la remontada estuvo cerca. Hasta que falló Ter Stegen. Otra vez el alemán se pasó de listo. No puede ir tan de sobrado con los pies. Es muy bueno parando balones y ha salvado muchas veces al Barça, pero estos fallos no se pueden permitir en un portero de su talla. Anoche quedó muy señalado. Quien sabe si los azulgrana habrían acabado puntuando. Su error fue decisivo. El club decidió apostar por él y vender a Bravo. Ahora debe demostrar que tiene capacidad para ser un digno sustituto de Valdés.

Sólo Piqué

Fue el líder, se dejó la piel, marcó los dos goles y tiró del carro creyendo hasta el final. Lástima que no haya once como Piqué en el campo. Es el ejemplo a seguir. La derrota debe servir para hacer una profunda reflexión. Hay que salir con intensidad. Más partidos con esta actitud y el Barça no ganará nada esta temporada. Hay que ponerse las pilas y dejar de pensar que los partidos se ganan con el escudo. Toca reaccionar antes de que sea demasiado tarde.