Mercedes y Ferrari, la referencia a seguir en 2018

Los tiempos en la Fórmula 1 están tan medidos que incluso la pretemporada es un periodo repleto de estrés para los equipos, donde cada día se convierte en un plazo constante y casi agónico para terminar cada elemento y partes del nuevo coche. Y en eso coincidieron ayer las dos escuderías favoritas y llamadas a luchar por el título este año: Mercedes y Ferrari.

Los primeros fueron los vigentes campeones con Lewis Hamilton a la cabeza en el circuito de Silverstone. El nuevo monoplaza continúa la saga y se denomina W09, a lo que han añadido las siglas EQ que representan a los modelos de calle 100% eléctricos que la marca planea comercializar en los próximos años. El coche es una clara evolución del monoplaza con el que lograron el campeonato, pero más afinado, más evolucionado y con algunas zonas claramente mejoradas como la mayor estrechez de su zona trasera. Toto Wolf, jefe de equipo, mostró su satisfacción con el diseño del nuevo coche, pero no tanto con la introducción del sistema de seguridad que rodea a los pilotos, el HALO: “Hay que cuidar la seguridad de los pilotos, pero tenemos que intentar encontrar alguna solución más atractiva, aunque las pruebas han demostrado que se puede realizar una rápida extracción del piloto en caso de un sencillo accidente, pero está por ver qué sucederá en una extracción complicada”, señaló.

Por su parte, minutos después de que Mercedes pusiera de largo su monoplaza lo hizo Ferrari en su sede de Maranello, por todo lo alto, y con el español Marc Gené como maestro de ceremonias. El coche ha sido bautizado como “SF71H” y de todos los que han sido presentados hasta la fecha es el más trabajado por la gran cantidad de novedades que presenta. También resulta una evolución del monoplaza del pasado año, sin embargo, sus responsables afirmaron que las principales mejoras están en la unidad de potencia. También llaman la atención el deflector que gobierna el HALO y un aletín que hay en la parte trasera de la carcasa de los espejos retrovisores, algo que busca ganar algo de aerodinámica. En Italia parecen muy confiados, pero tendrán que tener en cuenta que este año la fiabilidad es un factor muy importante ya que la reglamentación reduce de cuatro a tres los motores que pueden utilizarse durante toda la temporada sin penalizar en parrilla de salida. Además, también se han producido cambios en algunos puestos clave, con altas y bajas en el muro de boxes, y todo ese engranaje deberá funcionar si no quieren agotar la paciencia del “gran jefe”, Sergio Marchionne.