El Barça gana al Rayo con un polémico penalti (3-1)

Semedo, al que hicieron un penalti polémico que supuso el 2-1, junto con la salida de Dembélé permiten al líder salvar el partido contra el Rayo antes de recibir al Lyon

El primero (Barcelona) contra el penúltimo (Rayo Vallecano)... Y gol del penúltimo. Se le atragantaba al conjunto de Valverde el partido de entreguerras antes de la Champions y después de las dos batallas contra el Real Madrid. Así es el fútbol: lo que no consiguió el eterno rival en 180 minutos lo logró el modesto Rayo en apenas 24. Dispuesto a acumular muchos hombres para defender, pero no demasiado cerca de su área, se intentaban desplegar los chicos de Míchel con Bebé y Advíncula por la derecha y se frotaba las manos De Tomás esperando que aparecieran una oportunidad y los espacios.

Ambos llegaron de la mano, y cuando agarró la pelota con terreno por delante se la escondió a Piqué y Semedo para ajustar el balón al poste, lejos de Ter Stegen. Daba la campanada el equipo de Vallecas y se obligaba el Barça a un esfuerzo extra. Si el líder de LaLiga tenía parte de la cabeza en el duelo de la Champions contra el Lyon, rápidamente tuvo que poner los cinco sentidos en el presente.

Ya había dispuesto de alguna ocasión en un cabezazo de Messi y un tiro de Coutinho, pero en general le costaba al Barcelona moverse ante la maraña que tenía delante. Demasiadas piernas y demasiado poco sitio para maniobrar. El campo «era» pequeño, todo se desarrollaba en pocos metros, por mucho que Semedo y Alba intentaran hacerlo más grande con sus llegadas. Se defendía bien el Rayo con el balón en movimiento, a la espera de que le llegara otra oportunidad, pero falló con la pelota parada: entró Piqué solo y remató la falta lanzada por Messi para empatar.

Seguía sin fiarse Valverde. Quería a Dembélé ya en el campo, y el sacrificado fue Arthur. El cambio también es una pista de que el brasileño jugará contra el Lyon. El francés hizo una buena sociedad con Semedo y por ahí revivió el Barcelona. Con las llegadas del lateral sí encontró los huecos el conjunto azulgrana y en una de ellas llegó el penalti de Amat que será objeto de polémica. El defensa se comió el regate y metió la pierna, pisa un poco a Semedo, que en cuanto lo notó se fue al suelo. La pena máxima la señaló el linier. En cualquier caso, no es una acción en la que tenga que intervenir el VAR, tal y como está concebido.

Lo marcó Messi, pero el encuentro no había acabado. Lejos de hundirse, creció el Rayo y se aproximó más que nunca a Ter Stegen. Pozo fue quien más se acercó a volver a poner las tablas. El problema para los madrileños era que al irse más arriba, se descubrieron y en el ida y vuelta Luis Suárez encontró el tercer tanto, asistido por Rakitic en el primer balón que tocó.

Messi lo intentó durante toda la segunda parte, pero en los últimos encuentros ha perdido la inspiración. No le sale. Contra el Lyon su equipo lo necesita.