Hulk se encargó de matar al Valencia en su vuelta a la «Champions». El Zenit aprovechó al máximo sus ocasiones en un partido en el que el equipo de Nuno careció de puntería, especialmente en la segunda parte, y que, quizá, no mereció tanto castigo porque llevó la iniciativa, tuvo la pelota, pero no encontró soluciones a la hora de definir ante un inseguro Lodygin.

Mestalla no se llenó. El ambiente no era el de las grandes ocasiones, pese a que han pasado dos años desde la última aparición valencianista en la Liga de Campeones, por los precios y porque el rival no tiene un gran nombre, aunque siempre acude a su cita entre los grandes.

Y eso pudo influir en el Valencia, que comenzó a paso ligero, mandando, pero sin intensidad. Quería ser el de Nuno un equipo académico, de buen toque y entradas por bandas con Piatti y Feghouli. Parejo era el constructor, mientras que Javi Fuego y Enzo Roco eran dos pivotes con vocación defensiva y de mucho trabajo. Pero el castillo se le derrumbó pronto al técnico portugués. Después de que Cancelo estrellase un balón en el larguero (min 2), a la primera que tuvo Hulk la metió. El brasileño aprovechó el pasillo que le dejaron los defensores valencianistas y la clavó. Jaume Domenech no pudo hacer nada.

Tocaba subir la cuesta, cambiar la dinámica, pero lo que ocurrió es que el Valencia se apagó. Reparte aciertos y errores y fue el Zenit el que se mostró más peligroso en sus contras. Hulk intervenía en todas y Domenech tuvo que emplearse en dos ocasiones. Al equipo de Nuno le faltaba movilidad, precisión y cuando apareció Feghouli para centrar con fuerza desde la banda el cabezazo de Piatti lo detuvo el portero. Pudo ser el empate y ocurrió que en la siguiente jugada en la que los rusos cruzaron el campo llegó el segundo zapatazo de Hulk. Pegó tan fuerte a la pelota que Domenech se la encontró encima de la cabeza sin poder reaccionar.

Nuno no esperó. Dos cambios en el descanso para buscar más capacidad ofensiva. Aparecieron Andre Gomes y Alcácer. Y el equipo comenzó a transformarse, a dominar, a crear situaciones de gol y a no rendirse. El portugués Cancelo disparó desde la banda y llegó un gol casi inesperado porque sus compañeros esperaban el centro.

Llovía menos en Mestalla, Negredo, muy gris, intervenía más y era Andre Gomes, con la ayuda de Parejo, el que organizaba el juego de ataque. El Zenit, encerrado en su área, sufría, despejaba los balones y ya no elaboraba los contragolpes. El acoso del Valencia dio su fruto y Andre Gomes empató con la colaboración del meta ruso.

Y ahora, a por el triunfo. Quedaba tiempo y el Valencia pensaba que el tercer gol era posible. Córners, acciones de peligro, remates de Alcácer y Negredo. Sin embargo, faltó precisión e intensidad para que el centro del campo parara a Witsel. El belga avanzó con la pelota y cuando iba a entrar en el área disparó con fuerza y colocación. Balón al palo y un gol que no estaba en el guión. El Valencia pagaba su irregularidad ante Hulk.

Ficha técnica:

2 - Valencia: Jaume, Cancelo, Mustafi, Abdennour, Gayá, Javi Fuego (Andre Gomes, m. 45), Enzo Pérez, Parejo, Feghouli (Rodrigo, m.71), Piatti (Alcácer, m.45) y Negredo.

3 - Zenit: Lodygin, Ankuyov (Neto, m.77), Garay, Lombaerts, Criscito, Javi García, Danny, Witsel, Smolnikov (Shatov, m.69), Dzyuba (Fayzulin, m.58) y Hulk.

Goles: 0-1, m.9: Hulk. 0-2, m.45: Hulko. 1-2, m.53: Joao Cancelo. 2-2, m.73: André Gomes. 2-3, m.76: Witsel.

Árbitro: Craig Thomson (SCO). Amonestó por el Valencia a Alcácer y Mustafi y por el Zenit a Smolnikov y Witsel.

Incidencias: partido de la primera jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones disputado en Mestalla ante 25.000 espectadores.