Isco busca su sitio

Madrid- Ancelotti lo ha contado mil veces: cuando llegó a la Juve y se encontró con Zidane, tuvo que poner en duda todo lo que había aprendido con Sacchi. Era un defensor del 4-4-2, porque cubría todo el campo y le daba equilibrio, pero el futbolista francés no entraba en un sistema así. Ni era un organizador ni era delantero. Jugaba en el medio, desde donde desordenaba a los rivales, pero también al nuevo joven entrenador.

Ancelotti se olvidó de sistemas y decidió que el punto de partida para organizar un equipo eran los jugadores. Y así ha construido una de las carreras más brillantes de los entrenadores actuales. En el Madrid no ha sido distinto. El dibujo ha ido cambiando según las lesiones o el estado de forma de los futbolistas. Primero se fió de Isco en la media punta, pero el espectacular comienzo del andaluz se interrumpió, quizá lastrado por su físico. Al no poder contar con su magia, Ancelotti cambió a un 4-3-3 hasta que se lesionó Khedira. Entonces volvió a pensar en Isco. Estaba descansado, pero no le veía sitio en un sistema que exige mucho trabajo a los centrocampistas. Cambió, entonces, al 4-2-3-1, con el que Isco era quien estaba en el medio de los tres, resguardado por dos mediocentros. Sin embargo, el duende volvió a ser intermitente y Ancelotti, de nuevo, ha variado. Ha vuelto al 4-3-3, quizá para siempre: «Nos da más equilibrio porque el trabajo defensivo de los tres centrocampistas es muy bueno y vamos a seguir con este sistema», explicó ayer. Isco, ahí, no lo va a tener fácil: «Le crea más dificultad. Puede jugar donde Di María o Modric, pero no está tan cómodo».

Contra Osasuna, en el partido de vuelta de la Copa, Ancelotti encontró una solución para Isco: «También puede jugar como falso nueve, en lugar de Karim, y jugará así», continuó el italiano. Hoy puede repetir en el campo del Espanyol. Está por delante de Xabi, Modric y Di María, y entre Ronaldo y Bale o Jesé. Muchas veces parece el futbolista más adelantado, pero la movilidad de los dos hombres de banda, le convierte en realidad en un mediapunta. Isco tiene que ganarse un puesto en el que Benzema cuenta con la confianza del entrenador. La otra opción es esperar a que vuelva su magia y el técnico lo considere, otra vez, imprescindible. Entonces cambiará: «No he olvidado el sistema anterior y también podemos jugar con él».

Espanyol: Casilla; Javi López, Sidnei, Colotto, Capdevila; V. Sánchez, R. Rodríguez; Stuani, S. García, Torje y Córdoba.

Real Madrid: Casillas; Arbeloa, Pepe, Nacho, Marcelo; Xabi Alonso, Modric, Di María; Bale, Isco y Ronaldo.

Árbitro: Clos Gómez (aragonés).