Coacciones

La puñalada de Rubiales a Jorge Vilda

El ex presidente de la RFEF niega que coaccionase a Jenni Hermoso y apunta al seleccionador Jorge Vilda

Luis Rubiales y Jorge Vilda
Luis Rubiales y Jorge VildaAgencia AP

Las futbolistas internacionales Alexia Putellas, Irene Paredes y Misa Rodríguez ratificaron ante el juez del "caso Rubiales" las presiones que habría recibido Jenni Hermoso por parte de la cúpula de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para que respaldase la versión de Luis Rubiales de que el beso a su compañera tras la final del Mundial en Sídney (Australia) el pasado 20 de agosto fue consentido. Una coacciones, que tras la declaración de Luis Rubiales ante el juez, colocan a Vilda en el centro de la polémica. Y es que el ex presidente de la RFEF no ha dudado en echar balones fuera y señalar al técnico como el autor de las "supuestas" coacciones al entorno de la futbolista.

“Quiero mirar a Jorge Vilda. Hemos pasado por mucho en estos años. Tú has pasado lo mismo que lo que me están haciendo ahora a mi. Me emocioné muchísimo, hasta el punto de perder el control, en el que en el primer momento miraste al palco y me dedicaste la victoria y te hice la señal de ‘ole tus huevos’ afirmaba Rubiales en la polémica Asamblea del 25 de agosto a la vez que le ofrecía una millonaria renovación. Ahora, acorralado en los tribunales, no duda en señalarlo ante el juez.

El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales declaró ante el juez que fue el ex seleccionador femenino Jorge Vilda quien decidió acudir al hermano de Jenni Hermoso para que hablase con ella tras el escándalo del beso del Mundial de Australia, porque «es un tío razonable».

"No sabia que estaba el hermano de Jenni"

«Yo no sabía ni que el hermano venía en el avión. Yo me enteré después porque Jorge Vilda, que venía sentado detrás mía me dijo: ‘Vengo de hablar con el hermano de Jenni, que es un tío razonable y tal, y va a hablar con ella (sic)», declaró Rubiales el pasado 15 de septiembre ante el juez de la Audiencia Nacional que lo investiga por delitos de agresión sexual y coacciones

Una declaración que confirma la versión de las futbolistas que detallaron lo ocurrido en ese avión de vuelta. "Mi puesto está en juego, hazlo aunque sea por mis hijas. Necesito que salgas conmigo", le dijo Rubiales entre lágrimas a Jenni Hermoso. "Rubiales en el vuelo hacia Madrid se dio cuenta de la repercusión mediática que estaba teniendo lo ocurrido y de las palabras del Miquel Iceta. Entonces se acercó a la jugadora con la mayor discreción posible para pedirle que por favor le ayudara en esto. Le dijo que estaba su puesto en juego y que si ella se pronunciaba iba a disminuir la importancia que se le estaba dando a esto... Ella pidió al entorno que no entrara", adelantó en su día Espejo Público.

Ante la negativa de la jugadora, Paredes -que fue la primera en darse cuenta de la gravedad de lo ocurrido-, Putellas y Misa han denunciado ante el juez que el técnico de la selección española, Jorge Vilda, intentó presionar a la familia de Jenni para que la "convencieran de hacer lo correcto" pero tampoco tuvo éxito.

El ex seleccionador deberá responder ante el juez como investigado el próximo 10 de de octubre. Los directores de la Selección masculina, Albert Luque, y de Marketing de la RFEF, Rubén Rivera, comparecerán ese mismo día para explicar el polémico viaje a Ibiza para presuntamente presionar a Jenni Hermoso.

Según la Fiscalía, Jenni Hermoso vivió una "situación de hostigamiento en contra del desarrollo de su vida en paz, tranquilidad y libremente" que encaja en el delito de coacciones, por el que Rubiales -y también Vilda, Rivera y Luque- se enfrentan a una posible pena de multa o incluso de prisión de seis meses a tres años.