Ciclismo
Mikel Iturria, una victoria y un salvavidas para Murias
Iturria pensaba que no iba a poder montar en bici nunca más después de fracturarse el fémur en 2017. Dos años después celebra su primera victoria profesional en la Vuelta.
«Me cuesta ganar», reconoce Mikel Iturria, emocionado en la meta de Urdax, incapaz de contener las lágrimas. No suele ganar el ciclista de Murias, pero se había marcado esta etapa, caminos de brujas al paso por Zugarramurdi, como su oportunidad para subir al podio de la Vuelta.
Aprovechó la fuga y el permiso del pelotón, que ya parece tomarse como una tradición el paseo hasta Urdax, para ganar. Sucedió igual en 2016, aunque de manera más exagerada. Entonces ganó el italiano Valerio Conti, el mejor de una fuga como la de ayer, con 33:55 de ventaja sobre el pelotón. En esta ocasión sólo dieron su consentimiento para que se marcharan los fugados. Un grupo de categoría, con ciclistas como Alex Aranburu y Gorka Izagirre, que lo intentaron pero el grupito de escapados no consintió su fuga.
La de Iturria sí, a falta de 25 kilómetros abandonó la compañía de Cavagna, Arcas y Lastra y comenzó su particular contrarreloj hasta la línea de meta. «Pensaba que me iban a coger a diez metros de la meta», reconoce. La distancia menguaba en los últimos repechos hasta estar por debajo de los diez segundos. Pero en lugar de mirar hacia atrás, Iturria lo hizo hacia delante. Aprovechó el descenso final de kilómetro y medio para lanzarse sin miedo hasta levantar los brazos en la meta de Urdax.
Es la primera victoria de Iturria como profesional. Un sueño que veía lejano hace dos años cuando se cayó en el Tour de Limousine y se fracturó el fémur por varias partes. «Pensaba que no iba a montar en bici», asume. Pero volvió a subirse. Sus padres, que estaban esperándole en la meta aquel día que se cayó y que en lugar del abrazo de su hijo recibieron la llamada de Jon Odriozola, el mánager del Murias, para decirles que su hijo estaba en el hospital, por fin pudieron festejar.
2017 fue un año para olvidar. Antes de fracturarse el fémur había sufrido una bursitis en invierno que retrasó su preparación y en la Vuelta a Madrid se fracturó el radio. Más tiempo perdido. El año pasado, en su primer participación en la Vuelta, también se cayó. Nada que le impidiera concluir la carrera y seguir compitiendo.
Ahora es un hombre feliz. Como todo su equipo, que espera cerrar el acuerdo con un patrocinador más pronto que tarde para seguir compitiendo el año que viene. «Llevo aquí cuatro años y han sido complicados. Son muchos años llegando a septiembre que no sabes si el equipo va a seguir, pero espero que esta victoria ayude a seguir al equipo» reconoce. No es sencilla la vida para un equipo modesto como el Murias y una victoria como la de Iturria puede significar una sentencia de vida. El año pasado la victoria de Óscar Rodríguez en La Camperona fue un empujón para la estructura que dirige Jon Odriozola. La de Iturria puede servir este año para dar continuidad al proyecto.
El ganador en Urdax reconoce que su trabajo no es rematar la faena del equipo. «Siempre he pensado que valgo para este pelotón, pero igual soy más un currela», reconoce. «Siempre he soñado con esto, pero ahora que lo he conseguido no me lo creo», asegura.
11ª etapa. Saint Palais-Urdax Dantzarinea (180 kilómetros)
Ganador (Premio Cofidis)
1-Mikel Iturria (Esp/Murias)
Clasificación General (Maillot Carrefour)
1- Primoz Roglic (Esl/Jumbo Visma)
Puntos (Maillot Skoda)
1- Primoz Roglic (Esl/Jumbo Visma)
Montaña (Maillot Loterías y Apuestas del Estado)
1-Ángel Madrazo (Esp/Burgos BH)
Jóvenes (Maillot Fenié Energía)
1-Miguel Ángel López (Col/Astana)
Equipos (Patrocinado por Andalucía)
1-Movistar Team (Esp)
Combatividad (Premio Continental)
Alex Aranburu (Esp/Caja Rural)