Athletic de Bilbao

Muere Rafa Iriondo, legendario jugador y entrenador del Athletic

Era el extremo derecho de una de las más recordadas delanteras del conjunto vasco.

Muere Rafa Iriondo, legendario jugador y entrenador del Athletic
Muere Rafa Iriondo, legendario jugador y entrenador del Athleticlarazon

Era el extremo derecho de una de las más recordadas delanteras del conjunto vasco.

Rafa Iriondo, legendario jugador durante 13 temporadas y también entrenador del Athletic Club, ha fallecido este miércoles a los 97 años, según ha podido saber EFE de fuentes cercanas a la familia.

Iriondo (Gernika, Bizkaia; 24-10-1918) era el extremo derecho de una de las más recordadas delanteras del conjunto vasco en sus ya 118 años de historia, la que a mediados del siglo pasado formó junto a Venancio, Zarra, Panizo y Gainza, de la que era el único que se mantenía con vida.

El extremo internacional -dos veces, ante Eire y Portugal, a la que marcó un tanto- sumó un total de 326 partidos en las 13 temporadas en las que estuvo en el equipo rojiblanco, en las que marcó 117 goles, a un promedio de más un gol cada tres encuentros.

Ambas marcas hacen de él el trigésimo quinto futbolista con más partidos jugados en el Athletic y su decimoquinto máximo goleador.

Durante su estancia en el equipo bilbaíno, en el que debutó a punto de cumplir los 22 años el 29 de septiembre de 1940 en un empate a dos ante el Valencia en la capital levantina, Iriondo logró seis títulos: una Liga, cuatro Copas y una Copa Eva Duarte.

Como futbolista, antes de llegar al Athletic jugó en el Gernika, el Bilbao Athletic y el Atlético Tetuán; y tras dejar el conjunto rojiblanco siguió en activo dos temporadas más, hasta 1955, en el Barakaldo y la Real Sociedad.

Ya como entrenador, Iriondo dirigió al Athletic en dos temporadas alternas (1968-1969 y 1975-1976), y en dos seguidas tanto a la Real Sociedad, entre 1972 y 1974, como al Betis, entre 1976 y 1978.

Como técnico del conjunto sevillano, curiosamente, se impuso a su equipo de toda la vida en una de la finales de Copa de peor recuerdo en Bilbao, la que ganó el Betis en 1977 tras una casi eterna tanda de penaltis después del 2-2 con el que terminó el encuentro.