Fuera carbohidratos, al menos dos horas de gimnasio al día y nada de bebidas alcohólicas ni azucaradas. Cualquiera que haya estado a dieta alguna vez, sabrá que la primera frase de este artículo es el mandamiento número uno en cualquier proceso de adelgazamiento. Hasta ahora.

Eva Mendes, Julia Roberts, Kate Hudson, Anna Wintour o Kate Blanchett han sido algunas de las pioneras en abrazar un nuevo protocolo de cuidados diseñados para controlar el proceso de envejecimiento, con efectos visibles en el exterior y en la salud general, conocido como dieta antiaging, que promete una mejoría sustancial a nivel orgánico y estético. ¿Una nueva moda o ha llegado para quedarse? Lo cierto es que el reconocido internacionalmente como el “padre” de la Teoría del Envejecimiento lo tiene claro. Hablamos del Dr. Perricone, un dermatólogo clínico americano cuyo mérito es haber descubierto el papel de ciertos nutrientes clave y su impacto sobre la belleza, la salud y la longevidad. Perricone nombra una serie de “súper-alimentos” que son aquellos con propiedades antiinflamatorias, saludables y rejuvenecedoras. Esta tendencia recién llegada a Europa, pero que en Estados Unidos es ya una forma de vida, ya no trata de machacar el cuerpo con dietas extremas y poco saludables, sino que indica qué comer para estar más guapas desde dentro y poder proyectarlo en el exterior. Los perriconistas lo tienen claro: si tu cuerpo funciona y estás sana, también estarás más guapa. La Dieta Perricone es más que una dieta, es un cambio de mentalidad, una manera de evaluar los hábitos alimentarios para conseguir una vida más sana, frenar la inflamación y la oxidación celular y con ello recuperar la salud de la piel y del cuerpo en general.

¿Cuáles son esos “súper-alimentos” antiinflamatorios, antioxidantes, antiarrugas y antiflacidez? Estos diez:

1. Salmón salvaje: es el alimento rey gracias a su alto contenido en DMAE y Omega-3 (grasas buenas).

2. Aceite de oliva virgen extra: ayuda en la lucha contra el colesterol malo.

3. Verduras verdes: brócoli, espinacas o espárragos verdes son una magnífica opción para generar Vitamina C. Además aportan mucha hidratación a la piel.

4. Fresas y frutos rojos: potentes antioxidantes con bajo contenido glicémico. Además ayudan a reducir la grasa corporal acumulada.

5. Lácteos naturales orgánicos: siempre sin excesos, el yogur, el kéfir o el queso feta son altamente recomendables porque mejoran la digestión.

6. Avena en copos: es rica en fibras y proteínas, mejora el sistema digestivo y protege el organismo frente a enfermedades.

7. Plantas aromáticas y especias: son recomendables para dar sabor a la comida, pero además hay especias como la cúrcuma que es antiinflamatoria y protectora. También el tabasco, porque los chiles son recomendables.

8. Té verde: se trata de una bebida clave dentro de cualquier dieta antiaging, es un potente antioxidante y el aminoácido theonina mejora el estado de ánimo.