El Gobierno justifica ahora su negativa a bajar el IVA de las mascarillas FFP2 en que no son obligatorias

El Gobierno no está dispuesto a recortar el IVA de las mascarillas FFP2, que son las que más protegen contra el coronavirus, según el consenso actual de la clase científica. Si hace unas semanas el argumento para cerrar las puertas a esta rebaja, en sintonía con la decidida para las quirúrgicas, era que la Unión Europea lo impedía, porque había que armonizar este tributo para todos los artículos, hoy la justificación a la que ha recurrido la portavoz de Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, es que “no están clasificadas como obligatorias por los expertos ni por las autoridades sanitarias” para luchar contra la pandemia. Así lo ha asegurado al término del encuentro de hoy del Consejo de Ministros.

Para salir del paso, la titular de Hacienda ha destacado que “este Gobierno fue de los primeros en el mundo en regular el precio máximo de las mascarillas” para que los precios estuvieran “en niveles muy aceptables”, con el fin de facilitar su acceso a la población. En abril pasado, el Ejecutivo limitó a 0,96 euros el precio máximo de venta de las mascarillas quirúrgicas, que en noviembre fue rebajado a 0,72 euros.

Semanas después de esgrimir que Bruselas lo impedía, el Gobierno bendijo el descenso del IVA aplicado a las mascarillas quirúrgicas de venta al público del tipo general del 21% al superreducido del 4%. En concreto, en noviembre de 2020 aprobó esta medida transitoria, que se mantendrá hasta el 31 de diciembre de 2021. Ahora se niega a recortar del 21% al 4% el IVA de las FFP2, alrededor de las cuales existe consenso científico sobre su eficacia en la protección contra el virus.