Distribución

El Corte Inglés considera necesario su plan de bajas voluntario para garantizar su viabilidad

La compañía transmite a los sindicatos que va a buscar las buenas condiciones económicas para los que se acojan

Establecimiento de El Corte Inglés
Establecimiento de El Corte InglésAlberto R. RoldánLa Razón

El Corte Inglés ha comunicado hoy oficialmente su intención de poner en marcha un plan de bajas voluntarias. La medida, que sólo afectará a la plantilla con contrato fijo de sus grandes almacenes, tiene por objetivo alcanzar un máximo de 3.000 salidas, que podrían elevarse hasta l. La compañía ha trasladado a los sindicatos miembros de su comisión sindical (Fasga, CC OO, Fetico y UGT) que tiene previsto iniciar un proceso de reorganización del grupo, en el que se encuadra este ajuste de plantilla, cuyo objetivo es “buscar la viabilidad de la empresa, su posicionamiento en un mercado cambiante, la reordenación del mundo del retail y su nueva dimensión tras el impacto de la venta online”, según han informado los sindicatos.

El plan de bajas se realizará “con el máximo diálogo, idéntico al mantenido hasta ahora con esta comisión sindical”, según ha transmitido la dirección de la compañía a las organizaciones. Además, el grupo ha comunicado a los representantes de los trabajadores que va a buscar “medidas positivas como la voluntariedad y buenas condiciones económicas para la plantilla”.

La próxima semana se constituirá en acto formal la comisión negociadora tal y como indica el Estatuto de los Trabajadores. Posteriormente, esta comisión iniciará las negociaciones con la empresa para acompasar las medidas, haciéndolas “lo más atractivas posibles a la plantilla”. Los sindicatos han anunciado que van a buscar “unas condiciones de salida de plantilla por encima de limites legales (20 días por año trabajado) y con posibilidades de adscripción voluntaria desde cualquier punto de España, de tal forma que ese ajuste de plantilla no se realice de forma traumática sino armonizada con los intereses de las personas”.

El anuncio de la reorganización se produce tras el cierre de del centro comercial que El Corte Inglés tenía en Linares y la reorganización de Guadalajara. En la plantilla, según los sindicatos, hay además “inquietud” por lo rumores que hay sobre otros posibles cierres que en ningún caso han sido confirmados por el grupo de distribución.

Año 2020 complicado

El plan de bajas afectará a un máximo de un 4% de la plantilla de los grandes almacenes de El Corte Inglés -quedan exentas del mismo otras divisiones del grupo-, integrada por unos 63.000 trabajadores. El Corte Inglés ya se acogió en marzo del año pasado a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causa de fuerza mayor para un total de 25.900 empleados, tras decretar el Gobierno el estado de alarma para frenar la expansión del coronavirus. La medida afectó al 29% de los 90.000 empleados que la compañía tiene en plantilla. Ya en noviembre, volvió a recurrir a estos expedientes en comunidades como Cataluña o Asturias donde sus gobiernos volvieron a decretar el cierre de todos los comercios no esenciales ante el avance del coronavirus.

Tras un primer trimestre (marzo-mayo) de 2020 muy duro, donde registró pérdidas de 510 millones de euros tras la paralización de la actividad de las tiendas varias semanas por el confinamiento, el grupo de distribución regresó al resultado bruto de explotación (Ebitda) positivo en el segundo trimestre de su ejercicio fiscal (entre el 1 de junio y el 31 de agosto), cuando alcanzó los 64 millones de euros gracias a la reapertura de tiendas y a la venta “online”, que registró un alza del 124% en este trimestre. La cifra de negocio consolidada durante este periodo se situó en 2.817 millones de euros, con un beneficio bruto de 811 millones de euros.

El anunciado ahora no es el primer plan de ajuste voluntario puesto en marcha por la compañía. El Corte Inglés ya pactó con los sindicatos en 2016 un plan de bajas incentivadas para 1.400 trabajadores, al que se acogieron 1.340. Entonces el objetivo era rejuvenecer la plantilla, por lo que el plan se destinó a mayores de 58 años, con más de 15 años en la empresa y 35 cotizados.