Prestaciones

Las ONG ya pueden colaborar en la concesión del Ingreso Mínimo Vital

El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones habilita el registro de mediadores que permite a las ONG acreditar la situación de vulnerabilidad de una persona o familia en circunstancias difíciles para acceder al IMV

Miles de familias necesitan un ingreso mínimo vital
Miles de familias necesitan un ingreso mínimo vitalCristina BejaranoLa Razón

El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha puesto en marcha el registro de mediadores del Ingreso Mínimo Vital (IMV) que permitirá a entidades del tercer sector de acción social, las ONG, colaborar en la gestión de esta prestación e incorporar así a 40.000 nuevos beneficiarios a esta ayuda. El pasado mes de octubre, el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, y la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, anunciaron varias mejoras de acceso y gestión del IMV que se incluirían en la ley del IMV (aprobada en noviembre). Entre ellas figuraba la “inminente” aprobación de un registro de mediadores, es decir, ONG que puedan acreditar la situación de vulnerabilidad de una persona o familia en circunstancias difíciles. Además, Escrivá anunció que en los próximos meses se contactaría con aquellos hogares que, según los datos del Ministerio, deberían haber solicitado el IMV —al cumplir con niveles de renta y patrimonio— pero no lo han hecho.

En un comunicado, Inclusión ha explicado hoy que, tras la publicación este jueves en el BOE de la orden ministerial correspondiente, las entidades ya pueden solicitar su inscripción dentro de una medida que busca ampliar el número de beneficiarios de la prestación. Una vez aprobado su registro como mediadoras, estas entidades, como ya pueden hacer los servicios sociales de las entidades locales, podrán emitir certificados para la acreditación de circunstancias como el empadronamiento o situaciones de vulnerabilidad especialmente complejas, como el sinhogarismo. “Con ello, contribuirán a facilitar el acceso a distintos hogares al Ingreso Mínimo Vital. Por ejemplo, podrán acreditar la situación de vulnerabilidad de una familia que resida en una vivienda con otras familias”, ha señalado Inclusión.

La figura de los mediadores sociales del Ingreso Mínimo Vital, destaca la nota, “constituye un mecanismo de cooperación reforzada” en la tramitación de la prestación necesario “de forma transitoria” para “agilizar y facilitar a la entidad gestora de la prestación, la acreditación de determinados requisitos exigidos para el acceso a la misma”.

Requisitos de los mediadores sociales

Para poder inscribirse en el registro, todas las entidades del tercer sector tendrán que cumplir una serie de requisitos, como carecer de fines lucrativos, hallarse al corriente de las obligaciones tributarias y de la Seguridad Social, disponer de puntos de atención directos a las personas en todas las comunidades y acreditar la experiencia de, al menos, tres años en el acompañamiento y asistencia a personas en riesgo de exclusión social.

Hasta septiembre, el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) había aprobado 336.933 prestaciones de IMV, con prácticamente 800.000 personas beneficiarias, unas cifras que siguen por debajo de los objetivos iniciales señalados por el Gobierno cuando se puso en marcha esta ayuda en mayo de 2020: llegar a unos 850.000 hogares en los que viven aproximadamente 2,3 millones de personas.