Telefonía

Adiós a una era digital: Telefónica se despide del ADSL con el apagado definitivo de su red de cobre

La operadora culmina este 27 de mayo el cierre de sus últimas 661 centrales de cobre

Telefónica cierra sus centrales de cobre, y con ello dice adiós al ADSL
Telefónica Pablo Hernando

Este martes, 27 de mayo, Telefónica apaga definitivamente su red de cobre, poniendo fin a una era que sostuvo durante décadas los servicios de telefonía fija e Internet (ADSL). Con este último paso, la compañía culmina la transición hacia una red de fibra óptica, liderando así la reconversión tecnológica que deja atrás una infraestructura clave para la conexión a internet desde el siglo pasado hasta bien entrado el actual, pero ya obsoleta frente a las exigencias del presente digital.

La compañía fundada en 1924 inició su plan de cierre de centrales de cobre en 2014 con el fin de llegar a la clausura definitiva en 2025, coincidiendo con el apagado del 3G. Los primeros cierres, hace 11 años, fueron los de una central en Sant Cugat del Vallès (Barcelona) y otra en Torrelodones (Madrid), y hoy bajarán la persiana las últimas 661 de las 8.532 instalaciones de este tipo con las que contaba la compañía en el marco de un proceso de apagado consensuado con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

De acuerdo con una resolución del organismo regulador de julio de 2024, por la que aceptó la petición del operador de adelantar el cierre previsto para 2026, la clausura de todas las centrales fue fijada para este 27 de mayo. No obstante, al cierre de marzo de 2024, Telefónica ya había desmantelado casi el 94% de sus centrales de cobre (7.820), ya que su objetivo es que la mayoría de la red hubiera sido cerrada antes de la celebración de su centenario, el 19 de abril de año pasado.

"Telefónica ha liderado el cierre del cobre en Europa con el apagado de la red de cobre en España. Gracias a esta migración tecnológica, los clientes de nuestra compañía pueden contar con una red de ultra banda ancha que ofrece siempre mejores prestaciones que la red de cobre", ha destacado la compañía sobre el proceso que culminará este martes.

Tras recibir correos, burofaxes, llamadas y avisos en las propias facturas, el 99,9% de los clientes de ADSL de Telefónica ya ha migrado sus servicios, de los cuales el 94% cuenta ahora con fibra y el 6% restante suple el apagado del cobre con otras tecnologías como el Internet satelital. Así, la cobertura de la fibra óptica de Telefónica a finales del primer trimestre del año rozaba los 32 millones de hogares, por lo que la compañía cuenta con la red más extensa en España.

En términos de emisiones, la fibra óptica consume 18 veces menos que el cobre con un tráfico equivalente. Telefónica calcula que el impacto ambiental de su nueva red es un 90% menor que la anterior, además de multiplicar las velocidades y prestaciones y ahorrar espacio físico. Este compromiso de Telefónica de cierre discurre en paralelo al que se puede observar en redes móviles, con el paso del estándar 2G/3G al 4G/5G, con un impacto 7 veces menor por consumo equivalente. Así, la compañía progresa hacia las cero emisiones netas en toda la cadena de valor en 2040.

Según fuentes de Telefónica, el cierre de 1.000 centrales supone desmontar 65.000 toneladas de cable y reciclar 7.140 toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos y otros elementos. Este desmantelamiento supone un ahorro de 355.000 toneladas de CO2. Además, el reciclaje de materiales y la venta del cobre, metal que se ha revalorizado mucho en los últimos años, ha supuesto unos ingresos extra para la operadora de aproximadamente 1.000 millones de euros.