Vivienda

Alquiler con opción a compra: ¿es rentable?

La adquisición no se formalizará hasta el momento pactado en el contrato de arrendamiento

Una pareja recibe las llaves de una vivienda
Una pareja recibe las llaves de una viviendalarazon

Comprar una vivienda cada vez es más inalcanzable, por lo que a muchos no les queda más remedio que apostar por inmuebles de alquiler para encontrar un lugar en el que vivir. No obstante, existe una alternativa entre ambos supuestos, el alquiler con opción a compra, para poder adquirir una casa a largo plazo pese a no contar con los ahorros iniciales que se necesitan para su compra.

El alquiler con opción a compra es un contrato de arrendamiento donde se le otorga al inquilino la posibilidad o el derecho de comprar la vivienda pasado un tiempo, aunque esto no es obligatorio. En este sentido, un porcentaje de las mensualidades del alquiler que se hayan pagado computan como parte de dicha compra, tal y como explican desde el blog del asesor hipotecario iAhorro.

Esta fórmula jurídica mixta es como si se comprase una vivienda a plazos, aunque la adquisición no se formalizará hasta el momento pactado en el contrato de arrendamiento. Además, no será necesario comprar finalmente la vivienda si no se quiere.

Ventajas y desventajas

No obstante, antes de apostar por esta fórmula será necesario prestar atención a las ventajas y desventajas de este tipo de operación. Uno de las principales beneficios es que se podrá ahorrar dinero hasta que llegue el momento de ejecutar la opción de compra y que las mensualidades pagadas se descontarán del precio final, siendo más sencillo adquirir la vivienda, además de tener más facilidades para encontrar financiación.

Mientras no se produce la compraventa, a efectos legales, el inquilino está bajo el régimen de arrendamiento, por lo que podrá disfrutar de las ayudas para el alquiler si cumple con los requisitos exigidos por la Administración.

Asimismo, las casas de alquiler con opción a compra ofrecen a los inquilinos una mayor flexibilidad para pensar en todas las alternativas y saber si el inmueble se ajusta a sus expectativas.

Esta opción también conlleva una serie de desventajas como que el precio del alquiler sea superior al de un arrendamiento ordinario. Además, si el precio de la vivienda baja, el inquilino no podrá beneficiarse de este descenso, ya que el precio de compraventa está pactado en el contrato firmado al inicio del período de arrendamiento. En el caso de que no se compre la casa, todas las mensualidades no servirán más que como pago de un arrendamiento y se perderá la prima de opción de compra pagada al inicio.

Gastos del alquiler con opción a compra

Antes de elegir el alquiler con opción a compra también será necesario saber los costes que hay que pagar y que aparecerán reflejados en el contrato. El asesor hipotecario explica que, como norma general, se deberán pagar los siguientes gastos:

  • Precio de la vivienda: se debe prestar atención a los precios del mercado y determinar si este es superior o inferior.
  • Prima de la opción de compra: esta suele rondar el 10% del precio del inmueble.
  • Reserva: se tienen que negociar las condiciones del contrato con el propietario, aunque lo más común es que se tenga que firmar un contrato de arras y dejar un dinero para que reserve la vivienda.
  • Mensualidades del alquiler: es posible que ascienda el precio del alquiler bajo esta fórmula.
  • Fianza: es habitual que en los contratos de alquiler se pague previamente algunas mensualidades para cubrir posibles daños o desperfectos en el inmueble.
  • Gastos de la comunidad: en el contrato debe figurar quién se debe hacer cargo de ellos.
  • Formalización de la compraventa: si finalmente se adquiere la vivienda se deberán abonar los gastos propias de esta operación como notaría, registros, etc.