Leche fresca con el doble certificado de pastoreo y de bienestar animal al mismo precio

Lidl ha dado un paso más en su línea de sostenibilidad: "ya somos la primera cadena de supermercados que tiene el 100% de su leche fresca con el certificado de pastoreo.

Tras dejar de vender huevos de gallinas enjauladas y eliminar las bolsas de plástico de todas sus tiendas salvo las de higiene, Lidl ha dado un paso más en su línea de sostenibilidad: "ya somos la primera cadena de supermercados que tiene el 100% de su leche fresca con el certificado de pastoreo y con el de bienestar animal de Aenor", aseguró Miguel Paradela, director general de compras de Lidl España. Paradela destacó que tener las vacas como antes alarga su vida, la duplica, al no soportar el estrés que viven las vacas en intensivo.

Este doble sello, fruto del esfuerzo de un proyecto de dos años, conlleva que todas las vacas que producen leche fresca pasteurizada para la compañía pastan al aire libre y que además cumplen con los requisitos más elevados de bienestar animal. En concreto, este doble aval asegura que "las vacas pastan cinco horas al aire libre durante al menos 150 días al año", precisa María Pardo, veterinaria que trabaja en las granjas gallegas que producen leche para Lidl. Además, "el 55% de la alimentación de estas vacas es forraje, añade la veterinaria.

En cuanto a las propiedades nutricionales, "según IRTA, la leche fresca tiene una mayor calidad y es más nutritiva que la UHT", afirmó Paradela.

"Las vacas de intensivo -prosigue- producen hasta un 40 por ciento más de leche que las que pastan. Pero las de pastoreo viven el doble de años, lo que permite rentabilizar al ganadero su inversión, y, además, la leche fresca de pastoreo significa un apoyo para las granjas pequeñas de toda la vida y eso es un valor añadido teniendo en cuenta el problema de la despoblación rural".

Lidl vende esta leche fresca de pastoreo y bienestar animal bajo su marca propia Milbona. Toda ella proviene de 100 granjas pequeñas de Galicia, que ya cuentan con esta doble certificación.

Unos sellos que conllevan un coste, "de entre un cinco y un 10% que no se ha repercutido en el consumidor. Cuesta igual que antes del doble de certificado. Nosotros pagamos al proveedor que se lo repercute en el precio al ganadero", precisa el director comercial de Lidl España, que espera que las ventas de este producto suban entre un 20 y un 30 por ciento más".