Desahucio

Más de 26.500 familias perdieron su casa en los seis primeros meses de 2014

El bombero Roberto Rivas, sancionado tras negarse a colaborar en el desahucio de la octogenaria Aurelia Rey en La Coruña, durante su comparecencia hoy ante los periodistas
El bombero Roberto Rivas, sancionado tras negarse a colaborar en el desahucio de la octogenaria Aurelia Rey en La Coruña, durante su comparecencia hoy ante los periodistaslarazon

Más de 26.500 familias, en concreto 26.549, perdieron su casa en los seis primeros meses de 2014, un 24,4 % menos que un año antes, principalmente por decisión judicial pues hubo 17.472 desahucios, pero también tras llegar a un acuerdo con el banco para entregarla, lo que sucedió en 9.077 ocasiones. Según los datos publicados hoy por el Banco de España, el 73,7 % de las 25.549 viviendas entregadas de enero a junio, exactamente 19.565 propiedades, eran el domicilio habitual, un 30,5 % menos que un año antes, mientras que las 6.984 restantes eran otro tipo, por ejemplo, segundas residencias.

A pesar de lo dramático de las cifras, si se tiene en cuenta el número total de viviendas en España con hipotecas, que ascienden a 6,55 millones, los 26.549 inmuebles entregados apenas representan un 0,41 % del total y el 0,33 % si era el domicilio habitual.

Además, el último informe de estabilidad financiera del Banco de España recogía que el 10 % de las hipotecas han sido refinanciadas por las entidades, porcentaje que ayer recordó el presidente de la patronal bancaria (AEB), José María Roldán.

"Esto significa que hay un montón de familias a las que el banco les está permitiendo respirar y acometer el pago de la hipoteca", añadió Roldán y, según los cálculos del sector, son más de medio millón de hogares teniendo en cuenta el volumen refinanciado y el importe medio de las hipotecas en España.

Pero volviendo a los datos publicados hoy sobre el número de familias que perdieron su casa en la primera mitad del año, en el caso de primeras viviendas, la gran mayoría, unas 12.434, fue entregada al banco por decisión del juez, mientras que otras 7.131 propiedades fueron cedidas de forma voluntaria.

En 5.761 ocasiones mediante la entrega de las llaves a la entidad para saldar la deuda hipotecaria, lo que se conoce como daciones en pago, que en comparación con el año anterior han caído un 34,9 %.

En cuanto a las 6.984 viviendas entregadas que no eran domicilio habitual, 1.446 fueron daciones en pago y las 5.038 restantes cambiaron de mano por decisión judicial, aunque de ese número la inmensa mayoría, 4.709 propiedades, estaba vacía.

Lo mismo sucedió en las entregas judiciales de 11.216 primeras viviendas, lo que explica que las fuerzas del orden sólo hayan intervenido en total en 16 casos, frente a los 88 de un año antes.

El Banco de España dice que el 83,6 % de las hipotecas que dieron lugar a entregas de viviendas ocupadas se concedió antes de diciembre de 2007, es decir, previas al estallido de la burbuja inmobiliaria.

De forma general se puede considerar que cada vivienda entregada corresponde exactamente con una familia, aunque no debe obviarse que en algunos casos puntuales, que el Banco de España no detalla, una misma familia ha podido perder más de una vivienda.

El supervisor publicó por primera vez en mayo de 2013 datos relativos a procedimientos judiciales hipotecarios respecto a viviendas basándose en una encuesta a un conjunto representativo de entidades, si bien manifestó que iba a solicitar regularmente esta información a todas las entidades cada seis meses.

De este modo pasó a publicar los datos de todas las entidades procedentes de un requerimiento mediante circular, aunque hoy añade que desde entonces, sin embargo, se han producido avances notables en la disponibilidad de información pública sobre ejecuciones hipotecarias.

En especial, recuerda, el pasado 30 de junio de 2014 el INE publicó los primeros resultados de su nueva estadística sobre ejecuciones hipotecarias, una información que tendrá una frecuencia trimestral y más pormenorizada, pues por ejemplo ofrecerá datos desglosados por comunidades autónomas.

Teniendo en cuenta la publicación de esta nueva estadística de ejecuciones hipotecarias por parte del INE, el Banco de España reconoce que estudia la conveniencia de cesar en la elaboración de su propia estadística.