Muere en un accidente en Rusia el dueño de la empresa de golosinas Migueláñez

Mario Migueláñez,consejero delegado y director general, falleció el martes 30 de agosto al precipitarse por un barranco

El consejero delegado de la compañía de dulces y confitería Migueláñez, Mario Migueláñez, falleció el martes 30 de agosto en un accidente sufrido en Rusia al precipitarse por un barranco.

En un comunicado, la propia empresa ha informado hoy de la muerte de su consejero delegado y director general, que se produjo mientras "ejercía su actividad de ocio preferida".

Un portavoz de la firma ha explicado a Efeagro que Mario Migueláñez, de 44 años, se encontraba en Rusia en un viaje programado para practicar su deporte favorito, la caza, en el transcurso del cual sufrió una caída por un barranco.

La compañía, que se define como la firma líder del sector en España, fue fundada en 1983 por su padre, Onésimo Migueláñez, y nació como distribuidora de artículos de confitería para Madrid y alrededores.

Su hijo primogénito tomó las riendas del negocio en 1994 y lideró su expansión desde entonces.

Mario Migueláñez, padre de dos hijos, era licenciado en Ciencias Empresariales y contaba con formación en Recursos Humanos y Marketing.

Desde el grupo de dulces y confitería han trasladado a clientes, proveedores y colaboradores que la empresa "continuará adelante de la misma forma que hasta ahora con el esfuerzo de todos".

"La familia agradece todas las muestras de apoyo que se están produciendo, aunque ruega que se respete su intimidad", han señalado en el mismo comunicado.

La compañía vende desde chocolates o bombones hasta caramelos y gelatinas a través de marcas como Migueláñez, Migueláñez Chocolates o Picotadas, a lo que suma otras divisiones de negocio centradas en celebraciones y eventos.