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Derecho laboral

¿Sabías que te pueden despedir estando de baja laboral? Estos son los casos que permite el Estatuto de los Trabajadores

Este estado no exime al trabajador de su despido siempre y cuando sea considerado y demostrado por la empresa bajo unos parámetros específicos

Un funcionario que sufrió acoso laboral tras demandar a la institución en la que trabajaba recibe una indemnización de más de 30.000 euros Canva

Cada año, millones de trabajadores en España se enfrentan a situaciones en las que una enfermedad o un accidente les obliga a ausentarse de su puesto de trabajo. La baja laboral supone un tiempo de recuperación en el que el empleado debe centrarse en su salud, pero también implica cambios en la dinámica de la empresa. Las empresas deben reorganizar tareas, contratar personal temporal o redistribuir responsabilidades para mantener la productividad sin afectar a los plazos ni a la calidad del servicio. Esta situación hace que la gestión de recursos humanos sea fundamental para garantizar que la organización siga funcionando con normalidad durante la ausencia del trabajador.

Durante la baja, el trabajador sigue percibiendo parte de su salario, generalmente a través de la prestación por incapacidad temporal gestionada por la Seguridad Social. La cuantía depende del tipo de baja y del tiempo de antigüedad en la empresa, y en muchos casos la compañía complementa la prestación hasta alcanzar el salario habitual. La reincorporación al puesto se produce una vez el médico determina que el trabajador está en condiciones de volver a realizar sus funciones, momento en el que se restablece la jornada habitual y se retoman todas las obligaciones laborales. Este proceso requiere coordinación entre el trabajador y la empresa para asegurar una vuelta segura y sin contratiempos.

Además de los efectos sobre el empleado, la baja laboral también genera implicaciones económicas y organizativas para la empresa. Las ausencias prolongadas pueden afectar a proyectos importantes, retrasar entregas y obligar a redistribuir recursos humanos. La planificación de personal se vuelve más compleja y la gestión de costes se incrementa, haciendo que la baja no sea un asunto exclusivo del trabajador sino un reto conjunto que requiere coordinación y comunicación. Por esta razón, muchas empresas implementan protocolos internos para minimizar el impacto de las bajas en la productividad.

¿Te pueden despedir estando de baja?

Sin embargo, en algunas ocasiones las empresas aprovechan la situación de baja laboral para cesar a un trabajador, alegando motivos que puedan justificar la extinción del contrato. Este tipo de despidos generan incertidumbre y preocupación entre los empleados, que desconocen si la empresa puede legalmente terminar la relación laboral mientras se encuentran incapacitados temporalmente. La realidad es que existen supuestos en los que el Estatuto de los Trabajadores permite despedir a un trabajador incluso estando de baja. Esta circunstancia resalta la importancia de conocer los derechos laborales y las limitaciones legales del empleador.

El artículo 52 establece que se puede extinguir el contrato por causas objetivas como ineptitud sobrevenida, falta de adaptación a modificaciones técnicas razonables o motivos económicos, técnicos, organizativos o de producción de la empresa. Por su parte, el artículo 55 regula el despido disciplinario, indicando que debe notificarse por escrito con la justificación de los hechos y que, si no se cumplen los requisitos, el despido puede ser declarado improcedente o nulo. Esto significa que siempre que el motivo alegado por la empresa sea ajeno a la enfermedad o accidente, el despido puede considerarse legal y procedente. Comprender estas normas ayuda a trabajadores y empresas a actuar conforme a la ley y a evitar conflictos innecesarios.

Los pasos a seguir para impugnar el despido

Cuando el trabajador considera que el despido es improcedente, cuenta con opciones legales para impugnarlo ante los tribunales. Puede solicitar su reincorporación al puesto de trabajo con el abono de los salarios dejados de percibir o, si no desea volver, reclamar una indemnización establecida por la ley. La impugnación se inicia mediante un procedimiento judicial en el que se revisan las causas alegadas por la empresa y se determina si existió o no discriminación relacionada con la baja médica. Este proceso puede tardar semanas o meses, pero garantiza que los derechos del trabajador sean evaluados por la justicia.

Mientras se resuelve la situación, el trabajador no deja de percibir la prestación correspondiente a la incapacidad temporal hasta que el médico otorgue el alta. Esto asegura que el empleado continúe cobrando durante el proceso de recuperación, aunque su contrato esté siendo cuestionado. La combinación de derechos laborales y procedimientos legales garantiza que ni el trabajador ni la empresa queden desprotegidos, y subraya la importancia de conocer la legislación vigente para actuar con seguridad en casos de despido durante la baja laboral. Mantenerse informado sobre estas normativas es fundamental para prevenir abusos y asegurar un entorno laboral justo y equilibrado.