Opinión

El sector asegurador, punto de encuentro para el ecosistema de productos y servicios de startups

Carlos Cendra, Scouting & Investment Lead de Innovvación Corporativa en Mapfre, reflexiona sobre la transformación del sector, impulsada por la tecnología y las startups, que redefinen su propuesta de valor

Carlos Cendra, Scouting & Investment Lead de Innovación Corporativa de Mapfre
Carlos Cendra, Scouting & Investment Lead de Innovación Corporativa de MapfreMapfre

El sector asegurador se ha transformado de forma significativa en las últimas décadas, adaptándose a los cambios tecnológicos, sociales y económicos que han evolucionado y modificado la manera en que las personas y empresas interactúan con los servicios y productos de la industria.

En este contexto, las startups han encontrado en este sector un terreno fértil para innovar, crear productos disruptivos y ofrecer soluciones personalizadas que responden a las necesidades de los consumidores actuales. Este fenómeno ha convertido al sector asegurador en un eje central para el ecosistema de productos y servicios de startups, marcando un antes y un después en la forma en que se conciben los seguros tradicionales.

Mucho más que insurtech

Cuando hablamos de la innovación en la industria aseguradora, hablamos de que, en la actualidad, los grandes agentes como MAPFRE tenemos la mira puesta en ámbitos como los riesgos emergentes, la nueva movilidad, la cobertura de nuevas necesidades de salud por la longevidad, de nuevos productos adaptados a realidades sociales incipientes o de opciones de hiperpersonalización, entre otros.

Esto implica que los acuerdos y alianzas naturales que se daban entre sector e insurtech – startups enfocadas en la tecnología para seguros – han de expandirse a otros nichos. Si bien esta relación seguirá dándose a corto y largo plazo – las startups insurtech se enfocan en el core de nuestro negocio y esto no se nos puede olvidar –, el sector asegurador se está convirtiendo en un punto central al que se conectan ecosistemas de servicios de startups de todo tipo de industrias.

En MAPFRE estamos materializando esta apertura a nuevos agentes a través de proyectos punteros. En salud, trabajamos con startups como Trak en iniciativas de rehabilitación digital como complemento a los ejercicios físicos en los centros médicos. Si nos vamos a temas relacionados con el cambio climático, estamos colaborando con Lobelia Earth para explorar su impacto en los riesgos físicos de nuestras carteras de reaseguro. Yéndonos a movilidad, CESVIMAP, nuestro centro de I+D para este campo, ha unido fuerzas con Simulytic para la investigación del riesgo potencial de los vehículos autónomos. Los proyectos y posibilidades son, como leen, inmensos.

Industria que conecta ecosistemas

Lejos de ser competidores directos – aunque en algunos casos sí que pueda darse la situación –, las startups y las aseguradoras tradicionales hemos encontrado formas de colaborar para impulsar la innovación en el sector.

Muchas aseguradoras hemos optado por asociarnos con estos agentes para integrar sus tecnologías, ofertas y servicios en los procesos existentes, si bien también hemos realizado inversiones directas en estas empresas emergentes para acelerar su desarrollo y, con él, el del sector.

Las startups nos aportan a las aseguradoras agilidad y capacidad de adaptación: en el entorno actual, donde cambia de un momento a otro la situación macroeconómica, geopolítica o social, las startups pueden adaptar sus modelos de negocio de manera más rápida, además de que han nacido en los ecosistemas digitales que priman hoy día por su propia naturaleza. También aportan frescura y están especializadas en un nicho concreto, lo que les aporta un foco y una especialización a la que a una gran corporación como MAPFRE le costaría mucho tiempo y recursos llegar.

Como contrapartida, las aseguradoras tradicionales ponemos encima de la mesa la experiencia que tenemos en el sector, una industria que en MAPFRE conocemos perfectamente no solo en España, sino en otros muchos mercados como LATAM o EE. UU. gracias a nuestros más de 90 años de vida. En nuestro caso, también compartimos con nuestros partners otros recursos técnicos, documentales o de equipo que estas empresas de reciente creación necesitan. Todo esto, sin olvidar el valor de nuestra marca, que tiene un alto nivel de reconocimiento.

Precisamente este intercambio de beneficios es lo que ha permitido abrir la puerta a esos nuevos nichos antes mencionados. La industria aseguradora es aglutinadora; en ella convergen distintas áreas con gran impacto social y económico, y el deber de los grandes agentes como MAPFRE es potenciar todas esas líneas de expansión, convirtiendo al sector en un punto de encuentro para distintos ecosistemas de startups: healthtech, mobility tech, death tech, Fintech… Y, por supuesto, insurtech.

El posicionamiento de la industria como un eje central para productos y servicios de startups no es casual. Todos los agentes estamos remando en una misma dirección y colaboramos con instituciones públicas y privadas para garantizar unos objetivos comunes que continúen permitiendo el desarrollo de una oferta que aporte valor a la sociedad.

Atrás ha quedado el foco en un único vertical; estamos virando hacia una colaboración mucho más transversal en la que el beneficiado principal esté claro: las personas.