El cara a cara daría hasta 500.000 votos al PP

El cara a cara de Atresmedia ha servido para apuntalar todavía más el crecimiento de Alberto Núñez Feijóo de cara a las elecciones generales del 23 de julio: según la encuesta de NC Report elaborada para LA RAZÓN con 1.000 entrevistas, el PP ha conseguido arañar más de medio millón de votos más. En total, casi 1,2 millones de votantes (un 3,2%) aseguran que el cara a cara va a hacerles cambiar el sentido del voto, de los cuales, más del 40% lo hacen en favor de los populares.

De esta manera, Feijóo recoge los frutos de su victoria en el debate. El candidato popular hizo mucho énfasis en apelar al voto útil durante el cara a cara para tratar de arañar el máximo número de votos posibles y tratar de lograr una victoria lo más amplia posible y minimizar las dependencias en el Congreso (sobre todo, de Vox). Parece que en el propio debate ha conseguido ya un empujón. El PSOE tan solo ha conseguido captar 150.000 nuevos votos gracias al cara a cara; mientras tanto Vox, ha logrado 152.000 y Sumar, 80.000.

Lo cierto es que Feijóo avasalló a Pedro Sánchez: según la misma encuesta, el 57,1% de los preguntados asegura que ganó el cara a cara; tan solo un 32,9% aboga por el candidato socialista. De hecho, un 17,1% de los votantes del PSOE y un 12,9% de los de Podemos también consideran que el ganador fue Feijóo.

En este sentido, tanto el experto en comunicación política, Pedro Marfil, como la directora de Estrategia de la Institución Educativa ALEPH, Gabriela Ortega, consultados por este diario, relativizan el peso que tienen los debates en las campañas. «Siempre se habla de lo decisivos que son los debates y las campañas, pero al final los debates y las campañas son acumulativos. Pueden pasar cosas, pero lo importante lo vemos en los acumulados», señala Marfil, en relación a que cada cosa tiene su peso específico dentro del global, pero no es determinante por sí sola. «Lo que permiten los debates es darles motivos a sus votantes para movilizarlos. Lo que hizo es reforzar el voto el PP», añade Ortega.

De esta manera, ambos coinciden en que el cara a cara nunca es determinante para decantar la balanza, aunque sí que tiene impacto en el conjunto de la campaña: a tenor de los datos de la encuesta, tan solo un 3,2% van a cambiar el sentido del voto, pero a la gran mayoría les permite ratificar su decisión de voto.

Marfil considera que Sánchez «no tuvo el día» y ha frustrado muchas de las opciones de remontada del PSOE porque empezaba a haber un «conato de recuperación». «Las expectativas de Sánchez eran altas y las de Feijóo muy bajas», señala el experto, quien asegura que el candidato popular aguantó mejor, aunque también advierte de que la política es «volátil y dinámica» en los últimos años y eso puede hacer cambiar las cosas de forma diametral.

Ortega valora que Sánchez sí consiguió colar en la opinión pública el mensaje que quería sobre los pactos del PP con Vox para agitar el miedo y de ello se ha estado hablando, pero no logró «meter en la agenda mediática» la reivindicación de su experiencia de Gobierno porque Feijóo «conocía muy bien los datos a nivel nacional» y pudo rebatirlo.

Tras el cara a cara, quedan aún diez días de campaña electoral y los dos expertos coinciden en alertar sobre las cautelas que deben tener los dos candidatos, pero sí que es cierto que Feijóo ha dado un paso de gigante para llegar a la Moncloa tras el cara a cara. También, en paralelo, está por ver la evolución de Vox y Sumar, que han quedado muy opacados por PSOE y PP durante la campaña electoral, aunque se antojan determinantes tras el 23 de julio. En todo caso, ambas formaciones se van a dejar escaños con respecto a las elecciones de 2019.