La Ley Antifraude y la factura electrónica: todo lo que debes saber

Conforme la industria avanza hacia una nueva era tecnológica, la adopción de la factura electrónica se vuelve cada vez más importante. Un documento digital que emerge como alternativa a la factura tradicional y brinda numerosos beneficios a las empresas, contribuyendo a la transformación digital. Además, esta transición va de la mano con la implementación de la Ley Antifraude o Verifactu, diseñada para salvaguardar la integridad de los procesos administrativos.

Un enfoque innovador que continúa ganando terreno entre las empresas del sector comercio. Ya que esta metodología trae consigo beneficios que no solo satisfacen las necesidades de los clientes, sino que también cumplen las medidas de regulación mencionadas anteriormente. Así pues, atrayendo a un número creciente de empresas que optan por adoptar esta alternativa para mejorar su eficiencia operativa.

La factura electrónica como inversión clave en la digitalización

Las empresas invierten en la digitalización de sus procesos, impulsadas por el uso de la factura electrónica y la necesidad de cumplir con la Ley Antifraude. Un impulso que lleva a muchas organizaciones a modificar completamente sus estructuras existentes, con el objetivo de adoptar estas herramientas en un entorno digital. Lo que les permite un manejo eficiente de la información y reducción de costos, además de mayor seguridad y transparencia en las transacciones comerciales.

Sin embargo, se trata de una transición que requiere una planificación cuidadosa. Ya que cambiar de sistemas tradicionales a la factura electrónica implica asignar recursos técnicos adecuados y una capacitación exhaustiva del personal. Sin olvidar que es fundamental cumplir con los requisitos establecidos en el Verifactu, en pro de garantizar la legalidad. Por lo que no solo implica cambios tecnológicos, sino también en la organización y procedimientos internos.

Importancia de la Ley Antifraude para la integridad de los pagos

Al hacer referencia a la Ley Antifraude, nos referimos a las disposiciones contenidas en la Ley 11/2021 de 9 de Julio, que establece medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal. Básicamente, el sistema Verifactu tiene como objetivo asegurar la transferencia de “facturas verificables”. También, juega un papel en garantizar un respaldo seguro en situaciones de ataques externos.

Debido a que la factura electrónica, si bien tiene como objetivo asegurar la integridad de los pagos por parte de deudores; también plantea la posibilidad de que modifiquen la información. Lo que llevaría a la evasión de impuestos a través de información falsa, dificultando la verificación y validación de los datos. De ahí que la Ley Antifraude, establezca mecanismos de seguridad para garantizar la autenticidad de las facturas electrónicas.

Una batalla por la transparencia financiera

Por esta razón, la Ley prohíbe el uso del software de doble facturación –bastante comunes en empresas– , ya que permiten llevar una contabilidad paralela. Una práctica que representa un riesgo significativo en la pérdida de información por manipulación de datos. Este riesgo es especialmente relevante entre pequeñas y medianas empresas que reciben una gran cantidad de pagos en efectivo. Y no solo implica la evasión de impuestos, sino también problemas legales y sanciones económicas.

Este tipo de aplicaciones permiten llevar un registro contable para las autoridades fiscales y otro oculto, manipulando los ingresos reportados a la Agencia Tributaria. De esta manera, eluden el pago de impuestos mientras emiten facturas a sus clientes. Con el fin de controlar estas prácticas, existen sanciones para negocios que utilizan este tipo de programas, las cuales llegan a alcanzar los 50.000 euros.

Empresas perseveran en implementación de factura electrónica

Por esta misma razón, se estableció un plazo hasta julio de 2024 para que las empresasrealicen estas modificaciones en sus sistemas. Asimismo, para garantizar la integridad y confiabilidad, la agencia tributaria tiene previsto implementar un sistema de certificación. Esto con el objetivo de asegurar que todos los programas cumplan los estándares establecidos y puedan distribuirse entre a autónomos y empresas sin comprometer la validez de las facturas.

Sin embargo, y a pesar de los desafíos que implica, cada vez más empresas en España optan por implementar la factura electrónica. Esto debido a los beneficios que ofrece, y también como resultado de la Ley de Creación y Crecimiento, que tiene como objetivo fomentar las relaciones comerciales electrónicas. De ahí que la factura electrónica se convirtiera en un nuevo estándar para las transacciones comerciales.

Aunque todavía representa un gran desafío, especialmente para las empresas pequeñas y autónomos que deben cumplir con los requisitos legales establecidos en la Ley Antifraude. Además, a partir de la primavera de 2024, se convertirá en una obligación para todas las entidades que facturen más de 8 millones de euros. Y Se espera que para el 2025, la factura electrónica se haya convertido en una práctica completamente adoptada en España.