Casa Real

Zarzuela confía en la falta de recorrido judicial para frenar la “tormenta”

Pese a la preocupación, la expectativa es que la situación de Don Juan Carlos pronto deje de eclipsar el trabajo de los Reyes

Los Reyes visitan la provincia de Huesca
Los Reyes de España, Don Felipe VI y Doña Letizia, saludan a los vecinos durante su paseo por el centro histórico de la ciudad pirenaica de JacaVerónica LacasaEuropa Press

Sus Majestades los Reyes visitaron ayer el Alto Aragón en una jornada más de su gira por las comunidades autónomas. Mientras el presidente del Gobierno, durante la rueda de prensa conjunta con el primer ministro italiano Conte, vertía sus ambivalentes opiniones sobre las investigaciones centradas en Don Juan Carlos, los actuales Reyes se interesaban por el relanzamiento de la economía en la zona y agradecían los esfuerzos realizados durante la pandemia. Y esta es la línea en la que va a continuar Zarzuela: aunque la preocupación es comprensible y la tormenta mediática y la lluvia fina de titulares a todas luces perdurarán, también lo hará el trabajo de los Reyes en lo que se considera una nueva época que comenzó el 19 de junio de 2014 con el compromiso del nuevo Monarca de «velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente (…) porque solo de esa manera, se hará acreedora de la autoridad moral necesaria para el ejercicio de sus funciones».

Además, el análisis jurídico que se hace del desarrollo de las investigaciones del supuesto papel de Don Juan Carlos en el cobro de comisiones ilegales por la adjudicación a empresas españolas de la línea de alta velócidad entre Medina y Meca, no invita a pensar que tenga mucho recorrido. Es la utilización mediática que del caso hacen elementos empeñados políticamente en la superación del actual marco constitucional lo que más preocupa. Pese a la ambigüedad de las declaraciones de ayer del presidente y su doloroso contraste con lo dicho el martes por la ministra Montero, lo cierto es que la clave de la estrategia de Zarzuela, el comunicado del 15 de marzo, fue respaldada por Sánchez, que agradeció explícitamente el distanciamiento de la actual Jefatura del Estado. Este hecho calmó algo lo ánimos ayer en sectores preocupados por el futuro de a Monarquía ya que, ciertamente, invita a hacer más plausible el hecho de que el Jefe del Ejecutivo estuviera cediendo no solo a sus socios independentistas sino a los cuadros mas repúblicanos de su propio partido.

Fue en efecto en aquella fecha cuando Zarzuela hizo público su primer y último pronunciamiento al respecto de todo lo relacionado con las investigaciones centradas en Don Juan Carlos. El comunicado fue resultado directo de la primera información en la que se relacionó a Felipe VI con una de las fundaciones que habían sido supensatamente utilizadas para cobrar comisiones. La decisión de Zarzuela consistió en negar cualquier conocimiento por parte de Don Felipe de que su nombre aparecía en la consitución de tal fundación, la retirada de la asignación a Don Juan Carlos y la renuncia a la herencia. Por lo demás, y fiel a la línea habitual de no valorar asuntos de índole políticos, la Casa del Rey no realizó comentario alguno sobre las declaraciones del presidente del Gobierno y se centró en poner en valor la agenda desarrollada por Don Felipe y Doña Letizia en Aragón, donde el Monarca tuvo un bonito gesto para con los naturales de esta población: «Y confío que Aragón va a dar una muestra de ese arrojo y gallardía que siempre os ha representado y que tantos frutos ha dado a España», dijo.