El yihadista “okupa”

Era un “okupa” más en apariencia, de los muchos que se pueden encontrar en Tarrasa o en cualquier otra ciudad española. Debajo del disfraz de antisistema (atención a este dato) se ocultaba un marroquí de 33 años dedicado a la difusión de la propaganda yihadista de Daesh. La Policía Nacional, en concreto la Comisaría General de Información y la Brigada Provincial de Información de Barcelona, en una brillante operación han truncado la labor de este individuo, fundamental para la propagación de las ideas y postulados de Isis con el fin de convencer a otros musulmanes.

El arrestado, siguiendo las directrices de la banda, centraba sus mensajes de odio en los judíos, en los países árabes aliados de los EE.UU y en los propios norteamericanos.

El pasado 27 de enero, la Fundación Al-Furqan (el ala de medios afiliada a ISIS) publicó audio de 37 minutos atribuido al portavoz de la organización, Abu Hamza Al-Qurashi, bajo el título “Dios destruyó a los infieles”. Era la segunda aparición de al-Qurashi desde que confirmó la muerte, en una operación militar USA, de Abu Bakr al-Baghdadi, al tiempo que anunciaba el nombre del nuevo “califa”, Ibrahim Hasimi al-Qurashi.

En aquella intervención marcó como una de las líneas estratégicas a seguir el boicot del plan de paz estadounidense para resolver el conflicto palestino-israelí. Hacía un llamamiento para atacar a Israel, en concreto a los asentamientos y mercados. No era la primera vez que la organización anunciaba ataques contra los judíos. A finales de 2015, Baghdadi prometió convertir a Palestina en un “cementerio para los judíos”. Los soldados de la Delta Force y su perro “Conan”, el que le persiguió hasta el suicidio, no le permitieron llevar adelante ese proyecto.

Parece claro que el arrestado en Tarrasa había interiorizado esas instrucciones. Utilizaba las redes sociales para publicar multitud de fotografías y vídeos con mensajes en favor la lucha armada y la yihad violenta. Asimismo, difundía otras publicaciones con un marcado carácter antisemita.

Los investigadores constataron que la citada actividad de apología yihadista era continuada, por lo que, ante el peligro de que el investigado alcanzara un avanzado estado de radicalización y pasara a una fase operativa se procedió a su arresto...en la casa “okupada”.