Choque

El PSOE presenta sin Podemos la reforma de la Ley del “solo sí es sí”

Las negociaciones durante el fin de semana no han servido para llegar a un acuerdo en la coalición. “No podemos esperar más”, dicen los socialistas

Las negociaciones no avanzaban y, finalmente, no habrá acuerdo. El PSOE ha presentado esta mañana en solitario la proposición de ley para reformar la Ley del “solo sí es sí”. A las 11:30 horas el portavoz parlamentario, Patxi López, y la secretaria de Igualdad, Andrea Fernández, han registrado la iniciativa en el Congreso de los Diputados. El socio mayoritario, tal como publicara el sábado este diario, se había dado hasta hoy lunes para tratar de llegar a un pacto con Unidas Podemos. Un pacto que ha sido imposible. “No se puede esperar más”, aseguran en la dirección socialista, que quiere revertir “cuanto antes” los “efectos indeseados” de la norma estrella de Igualdad, bajo cuya vigencia se han beneficiado ya más de 400 agresores sexuales.

Fue justo hace una semana cuando la portavoz del PSOE, Pilar Alegría, lanzó el ultimátum. “Vamos a seguir hablando estos días para lograr una propuesta conjunta”, señaló, puntualizando de inmediato, que la citada propuesta se plantearía aunque no contase con el plácet de Podemos. “En caso de no darse esa puesta en común, por parte del PSOE daremos un paso adelante”, zanjó. Las conversaciones se han desarrollado durante todo el fin de semana, pero no han servido para llegar a un punto de entendimiento. El principal escollo sigue estando en las cuestiones “técnicas”.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, aseguraba ayer que “no va a ceder” ni dar “un paso atrás” que suponga tocar el consentimiento como centro de la normativa, pese a las “presiones muy fuertes” para volver al modelo anterior. Desde su entorno aseguran haber elevado hasta seis propuestas diferentes a Justicia que no han sido atendidas. “Seis folios” o “seis trabajos”, como los definen en tono irónico desde la parte socialista.

En contraposición, los técnicos de Justicia llevan meses estudiando las sentencias que se han ido emitiendo y los recursos de las víctimas –a las revisiones de penas– que también se han resuelto durante estos meses. “Ha habido tiempo para ver que no solo no se sienta jurisprudencia, sino al contrario, que hay disparidad de criterio y las rebajas de condena no se frenan”, señalan fuentes socialistas consultadas por este diario.

La dirección del PSOE hace hincapié en lo trabajado que está la proposición de ley. “No es una improvisación, es un texto legal impecable, que solo tiene como fin que, de cara al futuro, esto no vuelva a pasar”, aseguran las citadas fuentes. “Nosotros no presentamos propuestas políticas, son argumentos jurídicos y siempre con la víctima en el centro”, añaden, en clara alusión a las iniciativas que están siendo remitidas por parte de Podemos.

Punto de inflexión

Finalmente, los socialistas avanzarán en solitario, lo que supone un punto de inflexión en las relaciones dentro de la coalición y en un tema capital para el Ministerio de Igualdad como es su ley bandera. En todo caso, fuentes de Unidas Podemos aseguran que esto no pone en riesgo la supervivencia de la coalición y que no abandonarán el Consejo de Ministros. Esto es, ni los morados valoran salir del Gobierno tras esta desautorización ni en la parte socialista creen que vayan a hacerlo. Lo cual no significa que esto no suponga un duro golpe para la credibilidad del Gabinete y, especialmente, de Montero.

Sin embargo, por primera vez, el PSOE ha hecho un movimiento que pone en jaque la convivencia interna -tradicionalmente, este tipo de ultimátum vienen de la parte morada- porque han perdido el miedo a que Podemos rompa. “La única presión que tenemos es la de ver cómo las víctimas soportan que sus agresores salgan a la calle o les rebajen las penas”, señalan desde el PSOE.

A partir de ahora, queda por dilucidar la geometría parlamentaria con la que saldrá adelante la reforma. Sin el apoyo de Unidas Podemos, el PSOE podrá apoyarse en algunos socios de investidura, que están a favor de retocar la norma para frenar el incesante goteo de rebajas de penas, y también en el PP. La formación de Alberto Núñez Feijóo ha ofrecido sus votos a los socialistas para modificar la norma sin sus aliados morados, pero esto supone un importante factor de desestabilización interno en la coalición. En Ferraz no prevén negociar con el PP, pero tampoco van a despreciar sus votos.