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Armengol se escuda en Ábalos ante las sospechas por las mascarillas defectuosas: "Nos fiamos del Gobierno"

En su entorno no precisan quien fue el contacto entre el Gobierno de Baleares con Fomento

Francina Armengol con el Presidente de la Camara de Ecuador
Francina Armengol con el Presidente de la Camara de Ecuador. David JarDavid JarFotógrafos

El PSOE ha decidido blindar por completo cualquier actuación ilegal que tenga que ver con la mano de la tercera autoridad del Estado por la compra de mascarillas defectuosas a la empresa dirigida por el asesor del exministro Ábalos y sigue descargando cualquier responsabilidad política en su exnúmero tres. A la vez, desde el entorno de la presidenta del Congreso, Francina Armengol, siguen la misma estrategia y niegan cualquier tipo de connivencia con la trama. Este mismo martes dará explicaciones en el Congreso con el fin de apartarse de todas las sospechas que la señalan.

Fuentes muy próximas a Armengol se escudan en el ministerio de Transportes dirigido entonces por José Luis Ábalos como garantía ante la compra de mascarillas. De hecho, según sostienen, la relación con la empresa del «caso Koldo» Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas se produce exclusivamente a través del Ministerio de Transportes de José Luis Ábalos. «Nos daba más fiabilidad que el contacto fuera con el Ministerio de Fomento antes que con todos los comisionistas que llamaban», señalan las fuentes socialistas, que rechazan que Armengol tuviera conocimiento de nada relacionado con el suministro de las mascarillas de la trama.

Si bien, aunque en el entorno de Armengol aseguran que ese contrato, como todos, son «validados» por el Consejo de Gobierno autonómico, sostienen que no hay tiempo para revisar realmente todos los contratos y, menos aún, para uno por valor de 3,7 millones de euros ya que hay muchos más voluminosos económicamente. Ahí hacen énfasis en que la Intervención ha dado el plácet a ese contrato.

En este sentido, el mismo entorno de Armengol defiende que no tiene constancia de haber hablado con alguno de los implicados del «caso Koldo», pero niegan, en todo caso, que hubiera presiones del Ministerio para contratar con la empresa de la trama. Así, en su entorno evitan precisar quien fue el contacto entre el Gobierno de Baleares con el Ministerio de Fomento. Ahora bien, el contacto entre el Ibsalut y la empresa de la trama se hace entre el director del organismo balear e Íñigo Rotaeche, responsable de Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas. «Esos días llegan tropecientas llamadas y estábamos bajo máxima tensión. Te llegan 30 o 40 llamadas de teléfonos que no tienes grabados», señalan esas mismas fuentes, que restan relevancia al hecho de que se declarara el servicio de la trama como «satisfactorio» ya que es una cuestión que se queda siempre en lo estrictamente económica. «No se llega a tratar sobre si el material ha sido bueno o no», señalan.

Mientras, tanto en el PSOE como en Moncloa buscan frenar cualquier implicación que manche la reputación de la presidenta del Congreso y zanjan cualquier tipo de repercusión con responsabilidad política. «No aparece en las investigaciones ni en los documentos», responden en Ferraz ante la ofensiva desplegada por el PP. «Una persona que no aparece en documentación, que porque sí tenga que dimitir, por el artículo 33, simplemente es una petición que no tiene ningún fundamento», desgranan. Fuentes socialistas aseguran que aguantarán la presión de los populares en el Congreso y protegerán su liderazgo.