Pandemia

"Caso mascarillas": Luis Medina se sentará en el banquillo por estafa y falsedad

El juez abre juicio oral al empresario y a su exsocio Alberto Luceño y les da un día de plazo para que abonen 7,8 millones de fianza de responsabilidad civil

El empresario Luis Medina y su socio Alberto Luceño se sentarán en el banquillo por el "caso mascarillas", en el que se ha investigado la adjudicación, en marzo de 2020, por parte del Ayuntamiento de Madrid del contrato de adquisición de material sanitario por el que ambos se embolsaron casi seis millones de euros en comisiones.

Así lo ha acordado el titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, Adolfo Carretero, en una resolución en la que acuerda la apertura de juicio oral contra el hijo de Naty Abascal y el que fuera su socio. A ambos les imputa una estafa agravada y un delito continuado de falsedad en documento mercantil cometido por particular. En el caso de Luceño, le atribuye además un delito continuado de falsedad en documento oficial y un delito contra la Hacienda Pública. El instructor da además un día de plazo a los dos procesados para que presten una fianza de 7,8 millones de euros en concepto de responsabilidad civil.

Del mismo modo, el magistrado reclama a Luceño que indemnice a la Agencia Tributaria con otros 1,3 millones para hacer frente a posibles responsabilidades y le advierte de que en caso contrario "se le embargarán bienes en cantidad suficiente para asegurar la suma señalada".

El juez también acuerda el decomiso de los bienes actualmente embargados a los dos empresarios, así como de cualquier otro del que sean titulares hasta cubrir 4,6 millones de euros en el caso de Luceño y 912.700 euros en el de Luis Medina con el objetivo de hacer frente a posibles responsabilidades civiles a cuyo pago sean condenados.

Será la Audiencia Provincial de Madrid la encargada de juzgarlos, pues contra esta decisión judicial ya no cabe recurso.

Anticorrupción pide nueve años de cárcel para Medina

La Fiscalía Anticorrupción pide para Luis Medina una condena de nueve años de prisión, que eleva a 15 años en el caso del que fuera su socio. Además, el Ministerio Público reclama que ambos indemnicen de forma solidaria al Ayuntamiento de la capital (a través de la Empresa Municipal de Servicios Funerarios) con 3,6 millones de euros por las comisiones "ocultadas conscientemente" al Consistorio.

Del mismo modo, solicita al tribunal que les imponga el pago de unas indemnizaciones de 535.545,54 euros (por el sobreprecio pagado por los guantes de nitrilo); 1.910.040,66 euros (a cuenta de una comisión que se embolsó Alberto Luceño); 840.610,50 euros (por el sobreprecio impuesto por la comisión que finalmente no cobró Luis Medina); 879.208,65 euros (cantidad pagada por los test rápidos de detección de la Covid-19 que resultaron inservibles); y otros 61.165,47 euros correspondientes al transporte de la parte proporcional de los test que resultaron inservibles. En total, 4,2 millones de euros.

Asimismo, pide para Luceño una multa de 5,6 millones y de 450.000 euros para su exsocio.

Precios "inflados"

La Fiscalía Anticorrupción se querelló contra los dos empresarios por el cobro de 6,1 millones de dólares (casi 5,6 millones de euros) en comisiones, que habrían "inflado artificialmente", al intermediar en la compra de mascarillas, guantes y test Covid por parte del Ayuntamiento de Madrid en marzo de 2020. Según la denuncia de la Fiscalía, el hijo de Nati Abascal percibió un millón de dólares y Luceño otros 5,1 por este concepto (ocultando a su socio que se llevaba unas comisiones sensiblemente mayores), aunque el total pactado ascendía a más de once millones.

Medina invirtió esas ganancias en la compra de un yate Eagle 44, llamado "Feria", registrado en Gibraltar, por el que pagó 325.515 euros, y en la adquisición de bonos por valor de 400.000 euros.

Su socio diversificó más el gasto de esas comisiones: pagó una estancia de seis noches en un hotel de Marbella que le costó 60.000 euros; adquirió tres Rolex por 42.000 euros, así como ocho vehículos de alta gama (Aston Martin, Ferrari, Mercedes y BMW, entre otros) por los que desembolsó 1.034.999 euros, y se compró una vivienda y tres plazas de garaje (1.107.400 euros en total) en Pozuelo de Alarcón, y otros cinco coches de lujo (Aston Martin DBS Superleggera, Porsche Panamera, Lamborghini Huracan, Mc Laren 720S y un Mercedes A200) que costaron 1.028.499 euros y por los que entregó como parte del precio algunos de los que había adquirido anteriormente.