Iceta se «podemiza» frente a la gestora

Insta al partido a llevar a cabo un giro a la izquierda y el Congreso tumba la resolución a favor de una consulta para la independencia

Tras ser ratificado por su partido durante el congreso que este fin de semana celebra el PSC, Miquel Iceta desgranó la hoja de ruta del socialismo catalán para el futuro inmediato. Iceta es consciente de que han perdido buena parte de su electorado a causa del independentismo y de la aparición de Podemos, En Comú, en su versión catalana, y, por tanto, tienen que pasar a la «ofensiva». De ahí que el secretario general destacase la importancia de recoger el testigo del catalanismo huérfano tras el giro independentista de la antigua Convergència. Pero también recuperar las esencias del partido desde la calle y desde el municipalismo, una de las fortalezas que todavía hoy conservan. «El PSC no es un partido hecho para resistir, es para combatir y ganar, debe pasar a la ofensiva», señaló Iceta en su larga intervención. No en vano, el nuevo partido de Ada Colau, con Xavier Doménech a la cabeza, puede suponer la estocada definitiva para el socialismo catalán. Y, tal y como recordó, «tenemos que tejer un nuevo reagrupamiento socialista». También hubo palabras, aunque sin citarla, para la gestora del PSOE: «Negociar y ceder son sinónimos. No hay negociación sin cesión, sería imposición».

El primer secretario del PSC, por lo tanto, buscó la complicidad de los presentes para dejarles claro las líneas maestras de su proyecto. «Yo me puedo equivocar, puedo caer y fallar, pero el partido no se parará, no caerá y no fallará», señaló. «Hemos de crecer en cantidad y calidad, hemos de encontrar aquello que nos falta, y eso no crece en los árboles, sino en pueblos y ciudades, empresas, universidades, colegios», prosiguió para, acto seguido, sentenciar: «Es muy triste tener fugas de compañeros, pero nos tiene que preocupar más la pérdida de votos».

En vísperas de que los «comunes» –confluencias de izquierdas en las que participan ICV, EUiA, Podemos y la Barcelona en Comú de Ada Colau– den luz a una nueva formación política, Iceta llamó a los suyos a «pasar a la ofensiva» para intentar «crecer en cantidad y en calida» y tejer un «nuevo reagrupamiento socialista». «Con resistir no basta. Este no es un partido hecho para resistir, sino para combatir y para ganar», ha recalcado Iceta, que ha emplazado a las bases a «ir a buscar» a gente que pueda sintonizar con el ideario del PSC. Iceta no lo entiende como una simple «suma de siglas» o una operación entre «cúpulas» de partidos, sino como una apertura de puertas del PSC para dar cabida a «todos los socialistas y socialdemócratas de Cataluña».

A propósito de cómo hacer crecer el partido, Iceta fue muy claro. Por un lado, en el «catalanismo no independentista que no quiere aventuras». «Somos el único partido catalanista no independentista que está en el Parlament y en el Congreso», enfatizó. «Hemos de asumir su representación», añadió. Pero también se erigió como la auténtica socialdemocracia como respuesta al nuevo partido de Colau. A su juicio, el PSC debe asumir el papel de «partido útil» para dar «expectativa» a los que lo pasan peor. Y esta utilidad pasa por la socialdemocracia porque resuelve «cosas concretas».

En la segunda jornada del XIII congreso del PSC, en el Palacio de Congresos de Barcelona, Jaume Collboni, que preside el cónclave, dio lectura a los resultados de las primarias celebradas por los socialistas catalanes el pasado 15 de octubre: 4.889 votos para Iceta, 4.142 para Núria Parlon, 73 votos en blanco y 11 nulos.

Gestora

El congreso del PSC comenzó el viernes por la tarde con la presentación y aprobación del informe de gestión por parte de Iceta. Las relaciones entre el PSOE y el PSC y la necesidad de que el PSOE haga su congreso para renovar la secretaría general y la ejecutiva centraron la jornada del viernes. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, reclamó a la gestora del PSOE que debe serlo por un «tiempo breve» y reivindicó así la convocatoria de un congreso para elegir la nueva ejecutiva. En su intervención en el congreso del PSC para presentar el informe de gestión de la comisión ejecutiva, Iceta recordó que, tras la dimisión de su predecesor, Pere Navarro, en 2014, el PSC «también designó una gestora en junio, y el congreso se hizo tres semanas después».

El líder de los socialistas catalanes lamentó que no haya «sido capaz de convencer» al PSOE de votar en contra de la investidura de Rajoy y de entender la posición de los socialistas catalanes. «Confío en que sabremos superar esta discrepancia, porque queremos seguir construyendo con el PSOE un proyecto compartido», apuntó. Iceta reiteró que los socialistas catalanes no quieren «separarse ni un milímetro de sus hermanos» socialistas españoles.

Por otra parte, el primer secretario reconoció que el PSC «no es el partido que era», pero confió en recuperar la credibilidad y la confianza de los ciudadanos y por ello pidió ser conscientes de la realidad que viven y «no engañarse».