Juicio

Los etarras acusados de asesinar a Giménez Abad dicen que ese día estaban en una fiesta popular y en el cine

Carrera Sarobe y Zaldua niegan en la Audiencia Nacional que participaran en 2001 en el atentado contra el líder del PP en Aragón

TERRORISMO ETA.- La Audiencia Nacional juzga este lunes al exjefe de ETA Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, Ata, y a Miren Itxaso Zaldúa por su presunta responsabilidad en el asesinato del presidente del PP de Aragón Manuel Giménez Abad en mayo del 2001, cuando iba con su hijo a ver un partido al estadio de La Romareda, en Zaragoza. EFE/ Fernando Villar pool
Juicio a Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, Ata.FERNANDO VILLARAgencia EFE

El exdirigente de ETA Mikel Carrera Sarobe, "Ata", y la etarra Itxaso Zaldua, "Sahatsa" han negado en la Audiencia Nacional que participaran en el asesinato de Manuel Giménez Abad el 6 de mayo de 2001. "Ata", que según la Fiscalía -que pide para el que fuera jefe "militar" de la banda terrorista una condena de 30 años de cárcel- fue el autor material de los disparos, ha asegurado que estaba con unos amigos en el 'Herri Urrats', una fiesta en apoyo de las ikastolas de Iparralde que se celebra cada año en un pueblo del País Vasco francés, Senpere (Saint-Pée-sur-Nivelle). La otra acusada-para la que el Ministerio Público y las acusaciones que ejercen la familia de la víctima y Dignidad y Justicia (Dyj) reclaman idéntica pena- ha afirmado que el día del atentado estaba en el cine en un centro comercial de Usúrbil (Guipúzcoa).

En la primera jornada del juicio por el asesinato del que en esas fechas era senador y líder del PP en Aragón -en la vista oral la única representación de los populares ha sido la del diputado madrileño Daniel Portero, presidente de Dignidad y Justicia (DyJ)-, los dos acusados se han desmarcado del atentado, uno de los 379 de ETA que continúa sin resolver.

Carrera Sarobe -a quien varios testigos identificaron como el terrorista que disparó a Giménez Abad a bocajarro cuando se dirigía con su hijo menor de edad a ver un partido del Real Zaragoza en el estadio de la Romareda-, ha explicado que ese día se desplazó "como todos los años" desde el municipio navarro de Arantza, donde vivía, hasta Senpere. "Es una fiesta que todos los años íbamos los amigos y ese año también estuvimos ahí", ha contado, añadiendo que "en un momento dado les hacía falta gente que les echara una mano" en una "txozna" y estuvo ayudando "en la barra".

"No tuvimos nada que ver"

"Ata" -que solo ha contestado a las preguntas de su abogada- ha negado cualquier vinculación con el atentado. "No he participado en esos hechos", ha insistido antes de asegurar que, aunque le ha costado acordarse de dónde se encontraba ese día, "de lo que estoy absolutamente seguro es de dónde no estaba", en referencia a que no se encontraba en la capital aragonesa.

Y aunque ha reconocido que formó parte del "comando Basajaun" y que estaba en contacto con la dirección de ETA en Francia a través de comunicaciones, ha reiterado que no participó en el asesinato. "Ni yo ni el "comando Basajaun" tuvimos nada que ver con la muerte del sr. Giménez Abad", ha mantenido ante el tribunal, presidido por el magistrado Francisco Vieira.

Respecto a la otra acusada, ha afirmado que en esa época "no conocía" a Itxaso Zaldua, pues la conoció "años más tarde en el sur de Francia".

Zaldua -que sí ha contestado a las preguntas de las acusaciones- ha negado que formara parte del "comando Basajaun" y aunque sí ha reconocido su pertenencia a ETA, ha asegurado que sus primeros contactos con la banda terroristas fueron en la primavera de 2001, cuando se trasladó a Francia y le propusieron hacer de "correo" para la organización (trasladando a España las misivas de la cúpula etarra). Tres años después, en 2004, ETA elevó el listón y le propuso integrar sus "estructuras". Una tarea que asumió, ha dicho, sin pasar por los "comandos". "Yo no he estado nunca en un comando", ha subrayado.

Sin embargo, minuto después ha declarado como testigo-perito el agente de la Comisaría General de Información de la Policía que supervisó el reconocimiento fotográfico en el que un testigo señaló a Zaldua y ha afirmado que es "completamente imposible" que la acusada se integrara en la estructura de la banda terrorista sin haber pasado antes por los "comandos". "Hay que tener una experiencia previa", ha insistido.

"Esa acción me impactó"

La acusada ha afirmado que el día del atentado estaba en el cine en un centro comercial de Usúrbil, y no en Zaragoza, donde solo ha estado en una ocasión, "de viaje con mis padres, en la Pilarica". Según ha dicho, se enteró del atentado en el párking del centro comercial. "Yo no me acuerdo de todas las acciones de ETA, pero sí me acuerdo de algunas y esa me impactó", ha referido. Dice que dentro de "la dureza de todas las acciones de ETA", esa le pareció "dura" porque escuchó por la radio "que había un niño" (en referencia a que el político del PP iba acompañado de su hijo).

Respecto a una nota manuscrita intervenida al exdirigente de ETA Juan Fernández Iradi, "Susper", en la localidad francesa de Tarbes en diciembre de 2002 (que ha resultado clave para que los investigadores la sitúen en el "comando Basajaun"), Zaldua ha admitido que la escribió ella, pero ha precisado que formaba parte de las comunicaciones de la dirección de ETA que se encargaba de trasladar a España cuando ejercía de "correo" de la cúpula terrorista. Era, por tanto -según su versión- una nota interna que se limitó a transcribir (minutos antes, había sostenido ante el tribunal que en esas cartas tan solo escribía de su puño y letra la confirmación de que habían sido entregadas a su destinatario). En esa misiva, que los investigadores atribuyen al responsable del "comando", se hace referencia a una supuesta operación "Kazuela" (un atentado en ciernes, presumen los agentes) y a un tal "Komiki" (presumiblemente un candidato a incorporarse al "comando").

Hasta ese primer contacto con ETA en 2001, ha relatado, en Hernani "cuidaba niños, trabajaba en una sidrería, estaba en Ekin, donde a veces cobraba algo y otras no...". En primavera, "me proponen ir a un pueblo de Francia para una cita, a la que asisto, más que nada me preguntan por la situación política; saben de mí, saben que estoy en Ekin". Según su versión, le proponen hacer de "correo" llevando misivas "a diferentes sitios y personas" dos veces al mes que recogía en "un buzón" acordado "en una zona de mi pueblo". Ya en 2004, ha añadido, Peio Esquisabel, exjefe "militar" de la banda terrorista, le propuso "ir a Francia a reforzar las estructuras de ETA".

Una persona "de cara rolliza"

Tras los dos acusados, dos agentes han desgranado los indicios que condujeron a los investigadores -que en la fecha del atentado desconocían que Zaldua, detenida en 2005, perteneciese al "comando Basajaun"- hasta los dos acusados, fundamentalmente los "sellos" (los documentos intervenidos a miembros de ETA en el país vecino) remitidos por las autoridades francesas. Según ha contado uno de ellos, no dispusieron de una fotografía de "Ata" hasta su detención en 2010 en Bayona. En cuanto a la acusada, ha referido que el testigo protegido que identificó fotográficamente a "Sahatsa" años después dijo en todo momento que la mujer que huyó junto al etarra que disparó a Giménez Abad "era una persona de cara rolliza". Al menos cinco testigos sitúan a una mujer junto a "Ata" en el lugar de los hechos. Uno de ellos la describió como "una chica robusta, con los carrillos regordetes". Por eso, el abogado de Zaldua exhibió al tribunal varias fotografías de la acusada para intentar convencer a los magistrados de que siempre ha sido una mujer "delgada".

Las Fuerzas de Seguridad no disponían en la fecha del reconocimiento de otra fotografía de Zaldua que no fuese la de su DNI. Y esa mostraron al testigo, entre otras muchas, porque encajaba en la descripción fisionómica que había perfilado a los agentes. Las primeras noticias sobre "Sahatsa" no asoman hasta 2004 -explicó el agente- con la detención del responsable del aparato de acogida de ETA, que guardaba un estadillo con los diferentes responsables de los tentáculos etarras, en el que figuraba una persona con ese alias al frente de un subaparato de la rama "militar" de la organización. Entonces comprueban que había sido identificada en diciembre de 2002 en un control de carretera en el valle de Arán (Lérida) con motivo de la detención de "Susper".

El agente ha explicado que el "comando Basajaun" estuvo activo desde octubre del año 2000 (siete meses antes, por tanto, del asesinato de Giménez Abad) hasta "como mínimo" 2003, asumiendo desde 2002 funciones de "coordinador" (de los "comandos" en una determinada zona geográfica)

Por la espalda y a bocajarro

Según el relato de hechos de la Fiscalía, a las seis y media de la tarde de ese 6 de mayo de 2001, cuando Giménez Abad y su hijo Borja se dirigían al estadio de la Romareda, caminando por la céntrica calle Princesa, Carrera Sarobe «se aproximó a ellos y disparó por la espalda y a bocajarro» al político aragonés, que entonces tenía 52 años, «y continuó disparando mientras caía y cuando ya se encontraba tirado en el suelo». Todo ello, precisa, «en presencia de su hijo menor de edad». Tras cometer el asesinato, huyó del lugar acompañado por una mujer.

El senador del PP recibió el impacto de tres proyectiles de 9 mm Parabellum disparados por una pistola semiautomática de la marca HS. Uno de ellos le alcanzó en la zona lumbar derecha, otro en el glúteo y el último en la región occipital, falleciendo en el acto por un shock traumático y hemorrágico. ETA reivindicó el atentado el 26 de julio de ese mismo año mediante un comunicado publicado en el diario «Gara».