Entrevista

Francisco Núñez: «Page es cómplice de la ley del ‘sí es sí’ por no frenarla»

Las encuestas coinciden en dejar abierta la puerta a un cambio de Gobierno en Castilla-La Mancha. Es una de las plazas donde se decidirán las próximas elecciones generales

Ex alcalde de Almansa. Desde la etapa universitaria, cuando se licenció en politología y gestión pública, ha forjado una carrera en la que el municipalismo ha sido su campo de entrenamiento en política. Es un político diferente, que aprendió el valor del esfuerzo en las horas detrás de la barra del bar de sus padres.

Todas las encuestas dicen que solo tres partidos obtendrán representación en las Cortes regionales. Y que las elecciones se resolverán escaño arriba o abajo. ¿Le preocupa que un gobierno del PP sea a costa de un pacto con Vox, como el de Castilla y León?

Estoy totalmente convencido de que vamos a conseguir una mayoría suficiente de apoyos por parte de los castellanomanchegos para no depender de nadie en la tarea de gobernar esta región. La evolución de las encuestas nos dice que vamos a ganar las elecciones en Castilla-La Mancha, y en eso vamos a poner todo nuestro empeño.

Usted puede no querer esa coalición, pero es muy posible que ese sea el precio que en Vox ponen a sus escaños para darle la investidura si entre los dos partidos suman la mayoría de las Cortes regionales

Los pactos post electorales llegarán después de las elecciones, por lo que hablar hoy de un escenario, tras la apertura de las urnas, sería hacer política-ficción, algo que no me gusta. Como le he dicho, aspiramos a una mayoría suficiente en las urnas que nos permita gobernar y desarrollar nuestro proyecto para la región. Hasta el 28 de mayo por la noche, todo lo que digamos sobre este asunto serán solo cábalas.

Muy tranquilizador no resulta lo que se está viendo en Castilla y León, ¿no?

Más allá del ruido mediático que maximiza el Gobierno de Sánchez alrededor de ciertos asuntos, y la necesidad de ciertos partidos de aumentar su foco en determinados momentos con cuestiones muy concretas, el Gobierno que preside mi compañero Alfonso Fernández Mañueco está funcionando a la perfección en Castilla y León.

¿Qué nuevas medidas harían falta para impulsar las cifras de natalidad en su comunidad autónoma?

Medidas tan importantes, y que ya expuse hace un tiempo, como las ayudas a los nuevos nacimientos. Fomentarlos con hasta 14.500 euros por hijo para madres menores de 30 años. Y 500 euros al mes desde el quinto mes de embarazo, hasta que el niño tenga 2 años. Son ayudas que se incrementarían hasta los 20.300 euros en el caso de que esa madre viva en un municipio en riesgo de despoblación. Ayudas y, sobre todo, fomento del empleo y facilidad para los autónomos: ésas son nuestras recetas para impulsar la natalidad.

¿Cambiaría algo en el protocolo de atención a las mujeres que quieren abortar si llega al gobierno de la Junta?

El acompañamiento, la información y la atención psicológica son claves en este asunto. Abortar es una decisión muy importante para una mujer, y debe tomarse teniendo en cuenta sus consecuencias tanto físicas como psicológicas.

¿Cree que todavía hoy la mujer no sabe lo qué hace? ¿No es suficiente el protocolo vigente?

Es una decisión en la que una atención integral es necesaria en todo momento.

¿No la hay ya?

Siempre hay que valorar si se puede hacer algo más.

¿Diría que los extremos son igual de peligrosos a derecha y a izquierda?

Creo en la centralidad, la moderación, el discurso sereno y tranquilo. En la política del acuerdo y del tender la mano está la virtud. Ahí es donde yo estoy y donde está el Partido Popular de Castilla-La Mancha. El resto deberán valorarlo otros. En mi tierra, en Castilla-La Mancha, la extrema izquierda ya gobernó de la mano de Emiliano García Page, que dio entrada a su gobierno a Podemos. Mi región fue el banco de pruebas para los pactos que Sánchez mantiene con Podemos, y Page fue el primer presidente que dio entrada a Podemos en un gobierno regional. Ahora Page va de barón moderado, pero nada más lejos de la realidad.

¿Podemos y Vox son lo mismo?

Como le decía antes, es una repuesta que puede contestarle Emiliano García-Page mejor que yo pues fue el primer presidente que incluyó a Podemos en su gobierno.

Castilla-La Mancha fue la primera región con un partido de extrema izquierda en su gobierno, y Page fue pionero en establecer pactos con ellos.

La pregunta era si cree que Vox y Podemos son lo mismo. Page tuvo que gobernar con Podemos, y usted podría tener que hacerlo con Vox.

Como le dije antes, mi política es la de la centralidad.

Entonces, ¿no sería mejor buscar algún entendimiento con los socialistas para frenar el ascenso del populismo al gobierno?

El PSOE de Page, y su Gobierno, lejos de ser aquel que quiere mostrar a los periodistas nacionales, es un PSOE radicalizado y cerrado en banda a cualquier acuerdo que llegue de la mano del PP. Le voy a poner un ejemplo muy claro con un asunto de candente actualidad como es el caso de la Ley del «solo sí es sí». Page sabía desde julio del año 2020, cuando esa ley todavía era un anteproyecto, que iba a implicar rebajas de penas, que iba a traer serios problemas. Se jactan de que avisaron al gobierno, pero lo que esconden es que no han hecho absolutamente nada por frenarla. Si Page y su gobierno sabían desde hace dos años y medio que la ley del «solo sí es sí» iba a ser perjudicial, y no hicieron nada por remediarlo, son cómplices. Page tiene 10 diputados en el Congreso, entre ellos su número dos, Sergio Gutiérrez, y permitió que esa ley saliese adelante.

Esos diputados los nombró Sánchez no Page.

Fueron en la candidatura del PSOE de Castilla-La Mancha al Congreso de los Diputados.

¿En qué sería bueno llegar a pactos en su autonomía?

Tengo que insistir en esa idea de que el PSOE de mi región, el de Page, es un partido diferente al que Page les hace creer. Hemos ofrecido acuerdos al PSOE en materia fiscal, bajada de impuestos, ayudas a autónomos, redistribución del exceso de recaudación en los bolsillos de los castellanomanchegos, puesta en marcha de la carrera profesional sanitaria, mejora de la atención primaria…Una infinidad de medidas que los socialistas han rechazado solo por venir del PP. Ésa es la radicalidad y la cerrazón del PSOE ante mi partido, que le tiende la mano una y otra vez para llegar a acuerdos.

¿Por que deberían los ciudadanos de Castilla-La Mancha frenar otro gobierno del PSOE?

La respuesta es muy sencilla. Los ciudadanos de Castilla-La Mancha solo tienen que pensar si cuentan con la Sanidad que merecen, si cuentan con la Educación que merecen, si están pagando impuestos al nivel de las comunidades vecinas como Madrid o Andalucía. Si el Gobierno de Page está dinamizando Castilla-La Mancha al mismo ritmo que el de Juanma Moreno la comunidad andaluza, si confían en Page después de que les haya mentido una vez tras otra. Y después de que en lo peor de la pandemia se dedicara a insultarles.

¿Qué ofrece el PP que no tenga el PSOE?

Algo muy claro y que todo el mundo va a entender. Un proyecto para que Castilla-La Mancha crezca de verdad.

El PSOE está haciendo creer a los castellanomanchegos que no pueden ser más de lo que son ahora, que deben conformarse con ser siempre los últimos en todos los indicativos y resignarse a no poder crecer al ritmo de otras comunidades. El PSOE de Page es un muro para el crecimiento y el desarrollo de Castilla-La Mancha. Y he venido a la política regional para derribar ese muro y ofrecer un cambio tranquilo, sereno y moderado que dé a mi tierra el impulso que merece. Casi 40 años de socialismo son demasiados, por eso queremos dar al gobierno esa frescura y esas ganas que Page ya no tiene.

Page es tan duro como el PP con la gestión de Sánchez. Al menos, ¿se identifica con sus críticas?

No puedo identificarme con las críticas de Page porque son totalmente sobreactuadas, fingidas y con un fin totalmente electoralista. Page solo se distancia y critica a Sánchez porque cree que es una actitud que le dará votos. Si se fija, Page solo critica a Sánchez ante los medios de comunicación, pero en el Parlamento o en los Comités Federales del PSOE, es decir, donde hay que hacerlo, calla.

Se dice que hay dos PSOE

No estoy de acuerdo. Hay un PSOE, que es el de Sánchez, y sus ramificaciones en las regiones, como son Page, Vara, Lambán, Puig o Barbón. Todos son lo mismo.

¿Alguien se cree que, si éstos ganan las elecciones autonómicas, no van pedir el voto para Sánchez?

Feijóo dijo hace unos días que no seguirá como presidente del PP si pierde las próximas elecciones generales. ¿Usted hará lo mismo?

No contemplo en ningún caso perder las elecciones autonómicas.

¿En qué ha cambiado el PP en la etapa de Feijóo?

Feijóo ha aportado al PP nacional certidumbre, moderación, seguridad y un proyecto de una solidez y seriedad que los ciudadanos nos agradecen por la calle.

¿Sabe algo de Casado?

No. No he tenido oportunidad de hablar con él desde que se fue.

¿El futuro del PP es seguir mirándose en los gobiernos de Aznar y Rajoy?

El futuro del PP es el Gobierno nacional que formará Feijóo tras la convocatoria de elecciones generales. Pero creo que es positivo tener cerca a dos figuras realmente importantes para la historia del PP y de España, como los presidentes Aznar y Rajoy, que son un ejemplo de gestión rigurosa para nuestro país. Aznar y Rajoy tienen una experiencia en la gestión del gobierno de la nación que hay que aprovechar, por lo que veo un acierto tenerlos siempre cerca.

¿Ayuso es también un referente en su tierra?

La Comunidad de Madrid ejerce una influencia absoluta en toda Castilla-La Mancha, pero, sobre todo, en las provincias de Toledo y Guadalajara, en las comarcas de los corredores del Henares y La Sagra. Por eso la presidenta Ayuso es un referente, como también lo es el presidente de Andalucía, Juanma Moreno, o los presidentes de las comunidades gobernadas por mi partido. Aprovecho que me pregunta por Isabel para referirme a uno de los proyectos más importantes que tengo para Castilla-La Mancha, que es la puesta en marcha de un Eje de Desarrollo del Sur de Europa, un proyecto por el que aprovecharemos las sinergias que se producen entre Madrid, Castilla-La Mancha y Andalucía, para establecer acciones que atraigan inversiones, captación de fondos europeos o la asimilación de la fiscalidad. Un proyecto que ya he pactado tanto con la presidenta de la Comunidad de Madrid como con el presidente de la Junta de Andalucía y que haremos realidad a partir de mayo.

¿La invitará a hacer campaña con usted?

Isabel estará en Castilla-La Mancha con seguridad. Como le he comentado antes, nuestras regiones, Castilla-La Mancha y la Comunidad de Madrid, cuentan con intensos lazos tanto económicos como sentimentales, nos sentimos muy unidos a los madrileños, sobre todo en las provincias de Toledo y Guadalajara. Isabel es el claro ejemplo de que hay una forma de gobernar diferente, que es posible basar tus decisiones políticas en la libertad y en las buenas prácticas. El Gobierno de la Comunidad de Madrid está haciendo de la capital, y de sus ciudades y pueblos, verdaderos referentes. Madrid vive una primavera cultural, social, económica y laboral gracias al PP.

Cataluña. ¿El PP debe tener interlocución con ERC?

No se puede tener interlocución con quienes quieren romper España, no hay razonamiento posible con quienes tienen como única intención acabar con el régimen constitucional que nos dimos todos los españoles, con el Estado de Derecho que mantiene la armonía de nuestra sociedad y, sobre todo, con quienes quieren acabar con la unidad de nuestro país. No se puede vender España por el sillón de la Moncloa y un Falcón para pasear. En el PP lo tenemos muy claro, España es lo primero.

¿Comparte ese discurso que dice que Cataluña obtiene más que el resto de comunidades por la amenaza secesionista?

El Gobierno de Sánchez, el PSOE, está haciendo comunidades de primera y de segunda, con Cataluña recibiendo concesiones para tener como socios a los independentistas. Pero lo que más me duele es que el presidente de mi región apostó en el debate sobre el estado de la región del año 2021 por una armonización fiscal en España. Es decir, Page quería que todos los españoles paguemos los mismos impuestos. Detrás de esta propuesta –en la que encontró el apoyo de Gabriel Rufián– estaba la intención de subir los impuestos a todos los españoles. Ésa es la propuesta fiscal de Page.