La jueza rechaza las dos querellas contra Monedero

Juan Carlos Monedero no tendrá que responder ante la Justicia por delito fiscal en relación a los 425.150 euros que cobró por asesorar a gobiernos iberoamericanos. La titular del Juzgado de Instrucción número 45 de Madrid ha acordado inadmitir a trámite las dos querellas interpuestas contra el ex dirigente de Podemos por el colectivo Manos Limpias y la Asociación Pro Justicia Siglo XXI por delitos fiscales y societarios y falsedad documental. La magistrada sustenta su decisión en que Monedero regularizó su situación con la Agencia Tributaria antes de que se presentaran las denuncias contra él, que se acumularon en un mismo juzgado al hacer referencia a los mismos hechos.

Por tanto, la jueza ha optado por rechazar de plano ambas querellas, sin practicar diligencia alguna de averiguación, al «no existir indicios de delito» que justifiquen poner en marcha una investigación por fraude fiscal, confirmaron fuentes judiciales. La resolución no es firme y puede ser recurrida en reforma ante la propia magistrada o en apelación ante la Audiencia Provincial de Madrid.

Manos Limpias se querelló el pasado febrero contra el cofundador de Podemos, a quien consideraba «pieza fundamental» en la productora de Pablo Iglesias, Asociación Cultural Producciones con Manos Izquierda, a través de la cual, según el colectivo denunciante, se habría facilitado la «comisión reiterada de delitos». Manos Limpias afirmaba que desde esta asociación se habrían transferido a la sociedad Caja de Resistencia Motiva 2 Producciones fondos procedentes de asesorías a países como Venezuela y Bolivia.

En la querella se achacaban a la productora de Iglesias «diversas y notorias irregularidades, tales como el empleo de trabajadores sin figurar dados de alta en el régimen de la Seguridad Social; el pago de comisiones en “dinero B” por prestaciones de servicio; la supresión de derechos de los trabajadores; el abuso de las condiciones fiscales que caracterizan a una asociación sin ánimo de lucro y la obtención de subvenciones de entidades y personalidades internacionales, de sospechoso origen ilícito».

Monedero era, según Manos Limpias, el encargado de «gestionar las relaciones institucionales, económicas y financieras» de esa asociación sin ánimo de lucro «desempeñando un papel de dirección, gestión y coordinación junto con otros colaboradores».