Tensión

Podemos sigue la lucha con Sumar y no le entregará sus escaños

Los morados buscan su rearme con un acto en Madrid para mostrar músculo frente a Díaz

Sin tapujos. Sumar pasa al ataque contra Podemos y no deja ningún cabo suelto. Igual hace Podemos, que ayer desplegó a todos sus portavoces para contraatacar en medios. La formación que dirige Yolanda Díaz busca que los morados entreguen su acta al entender que sí la consiguieron es por presentarse bajo las siglas de Sumar. Además, saben que estos cinco escaños que poseen los morados son fundamentales para sacar adelante la agenda legislativa del Gobierno de coalición y que con ellos pueden llegar a tumbar leyes importantes en el Congreso de los Diputados. La batalla más inmediata es ésta, la de los votos. La cual, los morados, no piensan dejarse ganar. El partido de Ione Belarra defiende que sus cinco escaños son del partido morado y niegan que se trate de un acto de transfuguismo su salida al Grupo Mixto en el Congreso de los Diputados.

Ayer, la portavoz del partido de Yolanda Díaz en el Congreso, Marta Lois, acusó a los morados de acometer con «gran deslealtad» una «ruptura flagrante» tanto del grupo parlamentario como del acuerdo de coalición tras pasar al Grupo Mixto. No obstante, exigió a Podemos que actúe con «responsabilidad» y «altura de miras» a partir de ahora, dado que no le «cabría en la cabeza» que ningún diputado morado «quiera remar en contra o poner en riesgo» el Ejecutivo de coalición progresista, máxime cuando está padeciendo un «hostigamiento» evidente por parte del «bloque reaccionario de las derechas». Además, la portavoz pidió a los morados que devolvieran su acta de diputados «en coherencia» con la decisión que han tomado de «abandonar un proyecto político». Sumar se une así a la petición de los comunes que reclamó el escaño de Lilith Vestrynge, número cuatro por Barcelona.

Algo que rechaza de manera tajante Podemos. La portavoz Isa Serra aseguró que continuarán su trabajo en el Grupo Mixto y rechazó las acusaciones de transfuguismo que desde Sumar hacen en privado y señaló que es una «acusación muy grave» y «faltar a la verdad». Para la portavoz, Podemos concurrió en una coalición con Sumar el 23J y ha sido Yolanda Díaz la que ha roto el acuerdo de coalición con ellos «al no darles voz» y dejarles sin actividad política. «Hemos tomado esta decisión colectivamente», insistió. A esta operación se suma el líder en la sombra del partido, Pablo Iglesias, que ayer replicó a Sumar que quienes deben dejar el acta no son sus diputados, , sino «los que mienten» sobre la ruptura en este espacio político. Iglesias rebatió la idea de transfuguismo recordando otros casos en el Congreso, con Nueva Canarias que se presentó con el PSOE, UPN con el PP o Compromís con Unidas Podemos. «Se fueron al grupo mixto». Con ello intentaba aclarar que «una decisión colectiva de un partido no es transfuguismo». De cara al futuro en la legislatura, Iglesias abogó por «pasar página» y vaticinó que los diputados morados «van a encontrar muchos acuerdos con los diputados de Sumar».

A la vez, el partido, que se encuentra en transición al Grupo Mixto, prepara una hoja de ruta de rearme político frente a todas las críticas que está recibiendo del espacio de izquierdas por su ruptura con Sumar. La secretaria general morada anunció que el próximo 16 de diciembre el partido celebrará un «acto muy importante» en el Palacio de la Prensa de Madrid para «compartir un acto muy importante». Defienden que «hoy, más que nunca, necesitamos toda la fuerza, todo el apoyo para seguir transformando nuestro país».