El líder de Ciudadanos apuesta por un «Gobierno de transición, reformista y estable».

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, tachó la propuesta del Rey de «buena noticia» porque con ello se logra desbloquear la situación y al margen de negociaciones, España puede cumplir con esa investidura. Rivera entiende que Rajoy se apartó del camino y «ahora le toca a Sánchez intentar formar Gobierno». El presidente de la formación naranja insistió en que quiere que esta misma semana se abran las mesas de negociación tanto con PSOE como con PP, por lo que trasladó a su equipo que se ponga en contacto ya con los representantes de ambos partidos que se sentarán en esa mesa negociadora para hablar de reformas y puntos en común. Aún no sabía quiénes formarán parte de esa mesa, pero consideró que los diputados de su formación que estén en ellas podrían necesitar de expertos que les asesoraran en algunos puntos concretos, como por ejemplo en la reforma constitucional.

Rivera apuesta por un Ejecutivo reformista y de transición «que prime las reformas y tenga un calendario, una agenda concreta y tenga estabilidad». Insistió en que con el PSOE «compartimos» el marco constitucional, nuestra apuesta por una economía de mercado, por Europa; junto al de la regeneración democrática» y pidió que el próximo presidente «tiene que estar a la altura de la transición».

Ciudadanos volvió a posicionarse como mediador para descongelar la «guerra fría» y considera que con sus siglas «será más fácil llegar a una negociación». Indicó que hoy o mañana hablaría con Sánchez para «ofrecer y concretar fechas, calendarios, fórmulas de trabajo para intentar ver esos puntos de encuentro». Y apostó por «un Gobierno que pueda gobernar», porque, subrayó, algunos olvidan que «hay que gobernar».

Evitó hablar de si entraría o no en un Gobierno del PSOE porque «eso sería apresurarme», dijo Rivera, ya que consideró que si PSOE y Ciudadanos, o PP y Ciudadanos no están de acuerdo en las reformas, «a lo mejor no hace falta hablar de personas o ministerios». Hablar de personas o ministerios –consideró– es la ejecución de un plan y no el plan. Y dejó claro que con Podemos nunca se pondrá de acuerdo en el artículo 1 de la Constitución ni en su modelo económico a la griega o a la venezolana.