Sánchez se va pero el «no a Rajoy» se queda

La mayoría de dirigentes socialistas elude hablar de abstención o terceras elecciones pero mantiene el férreo «no es no» de Sánchez al líder del PP.

La convulsión vivida ayer en las filas socialistas tenía como protagonista la posible abstención del PSOE frente a una investidura de Mariano Rajoy. Y todo parecía apuntar que hoy, tras la supuesta derrota de los del «no» a Rajoy, alguien sacaría a la luz la opción de dejar gobernar al PP. Pues bien, lejos de eso, hasta los más «conservadores» siguen manteniendo la férrea postura del ya cesado Sánchez y su «no es no». Miedo o prudencia, ninguno habla de abstención.

El presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, se ha limitado a decir que «habrá que analizar las cosas en el futuro», pero, en cualquier caso, ante unas posibles terceras elecciones, el PSOE tomará la decisión "como siempre pensando primero en España, luego en el PSOE y, después, en nosotros".

El eurodiputado del PSOE Juan Fernando López Aguilar ha sido más contundente: «Sostengo desde el principio que el partido debe votar no a la investidura de Rajoy porque no se dan las condiciones de que merezca la abstención en aras de la gobernación del Estado». Eso sí, de nuevas elecciones no ha dicho palabra.

Desde Castilla-La Mancha, el secretario general del PSOE de Toledo, Álvaro Gutiérrez, ha aclarado que es falso que el secretario regional del partido, Emiliano García-Page, propugne la abstención para que gobierne Mariano Rajoy, ya que los socialistas castellanomanchegos «estamos en el no a Rajoy y a un gobierno con independentistas». O lo que es lo mismo, ni abstención, ni independentistas... ¿terceras elecciones?

La secretaria general del PSOE de Madrid, Sara Hernández, ha abogado por "votar no al Partido Popular"por una cuestión de "coherencia y credibilidad", por lo que la gestora tendrá que dialogar y convocar "lo antes posible"un congreso ordinario para dar voz a la militancia.

El secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, ha pedido hoy a las decenas de militantes que le han llamado para abandonar el partido que no lo hagan, y ha insistido en su "no"a que se forme un gobierno del PP, para "no perder la credibilidad"que les queda.

Y un poco más prudente se mostraba el expresidente socialista balear Francesc Antich, miembro de la gestora que dirige el PSOE tras la dimisión de Sánchez, que ha asegurado que defenderá en ese órgano que se tiene que consultar a la militancia si se quiere cambiar el mandato del Comité Federal de rechazar la investidura de Rajoy.

En conclusión, pese a la dimisión de Sánchez, la mayoría de los dirigentes socialistas elude hablar de abstenerse o ir a nuevas elcciones y se aferran a su «no» a Rajoy