Exclusiva: la Justicia dicta “sobreseimiento provisional” a la denuncia de Rocío Flores contra Telecinco por hacer pública su sentencia

El pasado mes de mayo, una Rocío Flores devastada y superada por la exposición mediática interponía una denuncia penal en el Juzgado de Instrucción Nº 38 de Madrid a los dueños de ‘La Fábrica de la Tele’, Óscar Cornejo y Adrián Madrid, productores del documental protagonizado por Rocío Carrasco, ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’. Una decisión que la protagonista tomó contra la productora después de que estos hiciesen pública en televisión la sentencia que ya la condenó en su momento como “autora responsable de un delito de maltrato habitual, de un delito de maltrato, de una falta continuada de amenazas y de una falta continuada de injurias” hacia su progenitora.

Flores consideró que publicar y difundir dicha sentencia representa “una invasión a su intimidad personal y familiar”, resultando esta una acción muy perjudicial en su desarrollo personal. Es por este motivo por el que decidió recurrir a la Justicia. La misma Justicia que llamó a declarar el pasado 21 de octubre a Óscar y Adrián en calidad de investigados.

Después de su declaración, en la que los protagonistas han asegurado “haber obtenido la sentencia que condenó a Rocío Flores a través de ‘Vanitatis’ y de Rocío Carrasco”, el juez ha dictado “sobreseimiento provisional”, paralizando así temporalmente el proceso debido a la insuficiencia de pruebas para abrir el juicio oral. Pero los abogados de Rocío Flores ya han presentado su recurso correspondiente, y se muestran confiados y esperanzados con la Justicia. Así lo ha podido saber en exclusiva ‘La Razón’.

Cabe recordar que durante el pasado mes de abril, una poderosa y decidida Rocío Carrasco contaba públicamente, con sentencia en mano, todos los detalles sobre el suceso que vivió con su hija aquel crítico verano de 2012. Una sentencia que fue previamente publicada en ‘Vanitatis’ y que durante la emisión de ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’, volvía a ver la luz pública ante casi tres millones de espectadores. Un hecho que, sin duda, ha tenido consecuencias para la joven.