Europa

Historia

Abjasia, el microestado independiente que pocos sitúan en el mapa

El territorio ubicado al noreste del mar Negro ha declarado su independencia de Georgia a pesar del rechazo de EEUU, la Unión Europea y la OTAN

Abjasia se encuentra al noroeste de Georgia
Abjasia se encuentra al noroeste de Georgia larazon Google Maps

El problema político que se mantiene entre España y Cataluña desde hace ya tiempo, provocado por el alzamiento independentista en la comunidad autónoma, ha hecho visible los numerosos conflictos territoriales que hay actualmente en Europa. Porque es en este continente donde predominan las micronaciones que declaran su independencia y luchan por su reconocimiento a nivel internacional. En muchas ocasiones las aspiraciones de estos territorios responden a un sentimiento histórico, cultural, religioso, lingüístico y/o económico.

Desde el siglo XIX las guerras por el reconocimiento de lo que sus habitantes consideran un estado soberano han ido sucediéndose. La caída de la Unión Soviética abrió un gran abanico de historias, quince países se formaron con la caída de la bandera roja, pero otras muchas zonas quedaron en un vacío político. También nos puede venir a la memoria el derrumbe de Yugoslavia, que dio lugar a las guerras del mismo nombre, guerras yugoslavas, y que acabaron por dividir al país satélite de la Unión Soviética en diferentes repúblicas. La desintegración de Yugoslavia daría lugar al conflicto bélico más cruento en el Viejo Continente, desde la Segunda Guerra Mundial. Como consecuencia surgieron los países de Eslovenia, Croacia, Serbia, Bosnia-Herzegovina, Montenegro y Macedonia.

Kosovo podría ser otro ejemplo de una independencia declarada de forma unilateral y sin acuerdo previo, en este caso con Belgrado, capital de Serbia, país del que quieren separarse. Consiguen así su ansiado objetivo, aunque a un gran coste humano y económico. La guerra librada en la década de los noventa dejó muy tocada esta provincia, que lograría su independencia en el año 2008, después de que la ONU autorizase la presencia internacional de Kosovo, ya que no incumplía el Derecho Internacional. Montenegro habría hecho lo mismo dos años antes, en el 2006, cuando sus habitantes votaron en referéndum el sí a la independencia.

Estos son solo algunos de los ejemplos de independencia vividos en Europa en las últimas décadas. Ahora es la República autónoma de Abjasia la que se declara independiente de Georgia, país del que aún forma parte teóricamente. Pero, antes de nada, vamos a situar el territorio en un mapa.

Abjasia se encuentra entre Rusia y Georgia
Abjasia se encuentra entre Rusia y Georgia larazon Google Maps

¿Pero cómo es realmente Abjasia?

El territorio protagonista se encuentra en una zona privilegiada de la geografía. Ubicada en la transición entre Asia y Europa, limita por un lado con el Mar Negro y, por otro, con una cadena montañosa. Es por eso que no es de extrañar que durante la época de la Unión Soviética fuese uno de los destinos favoritos. El problema reside en que cuando la Unión Soviética cayó, Abjasia, que en aquel momento pertenecía a la República Soviética de Georgia, aunque con bastante autonomía, declaró su independencia en 1991. La capital es Sujumi, que acumula a la gran parte de la población. Principalmente vive del turismo, especialmente los que vienen de Rusia, a los que deben mucho, como explicaremos más adelante.

Cuenta con 215.972 habitantes, según el último censo que data del año 2003, formado por abjasios, georgianos, rusos y armenios, mayoritariamente. Su población es en gran parte formada por cristianos ortodoxos, aunque también hay musulmanes. Disponen de su propio himno, de una bandera, rescatada del antiguo Reino de Abjasia, y de un ejército que se encarga de defender al estado. En la bandera vemos como predomina una mano abierta, que según ellos es para frenar a los enemigos y recibir a los amigos.

Bandera del país
Bandera del país larazon Google

El conflicto

La tensión étnica y política aumentó de manera considerable, hasta que en 1992 estalló la guerra. Cabe recalcar que para este momento la población autoctona, los abjasianos eran una minoría que superaba por poco el 15%. El resto de la población era primariamente georginanos. El gobierno del país dominó el conflicto sin muchos problemas, hasta que la intervención rusa a favor de Abjasia equilibró la balanza. Se denunciaron genocidios, limpieza étnica y expulsiones masivas. Hubo un descenso de población abrumador, pasando de unos 525.000 habitantes a la mitad, 250.000 en muy poco tiempo. Finalmente en 1999, el territorio de Abjasia declaró su independencia, siendo Rusia el primer país en reconocerlo. Claro que para poder sobrevivir deben servir al poder ruso, dado que la mitad de su presupuesto viene de Rusia. Por ello, el ruso es el idioma más hablado y, de hecho, es el ejército de este país quien custodia la entrada y la salida de la zona.

Sin embargo, no termina de ser considerado un país soberano, ya que no forma parte de Naciones Unidas, ni cuenta con el visto bueno de los países de la Unión Europea, ni de Estados Unidos. Apenas cuatro estados han ´reconocido al nuevo estado: Rusia, Venezuela, Nicaragua y Nauru.

En definitiva, otro punto en el mapa que vive en una situación de incertidumbre, con grandes problemas plíticos y sociales, ante la falta de un ayuda internacional. Todo provocado por un deseo ineludible de poder gobernarse a sí mismos y de poder decidir su fururo. La solución, si es que la hay, parece lejana.

Manifestantes en Georgia protestan por la intrusión de Rusia en el país
Manifestantes en Georgia protestan por la intrusión de Rusia en el país ZURAB KURTSIKIDZE EFE