País Vasco

ETA ordenó a Bildu oponerse a las detenciones de etarras

Apremia a la izquierda abertzale a aumentar la presión contra el Gobierno

«Refugiados» de ETA en Francia anunciaron ayer «pasos más audaces» para intentar normalizar su situación
«Refugiados» de ETA en Francia anunciaron ayer «pasos más audaces» para intentar normalizar su situaciónlarazon

MADRID- ETA ha transmitido a Bildu la necesidad de que, a partir de ahora, pasadas las elecciones, se «quite la máscara» de la moderación y muestre el auténtico rostro de una «izquierda abertzale combativa», dispuesta a hacer frente tanto al Gobierno que pueda formar el PNV en el País Vasco, como al central, que preside Mariano Rajoy con mayoría absoluta.
La reacción a las últimas detenciones en Francia, en las que se llegaba a decir que el Ejecutivo iba por el «mal camino», se cita, en medios antiterroristas consultados por LA RAZÓN, como una primera muestra de esta nueva estrategia. «¿A dónde conduce ese mal camino del que hablan los proetarras?», se preguntan. Está tan claro como la amenaza que conlleva.

Las órdenes de la banda, anteriores a los referidos arrestos, son consecuencia de los resultados electorales obtenidos por EH-Bildu en las autonómicas que, según han tenido que reconocer los propios proetarras, están muy lejos de las expectativas que se habían marcado y que habían transmitido a los cabecillas de la banda, cuando les convencieron de que por la vía del «proceso» no tardarían en tener dominado al PNV y encauzar los asuntos pendientes, como los presos y la negociación con el Gobierno.

La nueva estrategia no se va a quedar en la emisión de comunicados, más o menos duros, cuando proceda, sino que va a incluir un reforzamiento de la presión popular. Los resultados de las citadas elecciones han sido la «gota que ha colmado el vaso» de la paciencia etarra. En las tres últimas convocatorias electorales, los proetarras han perdido más de 40.000 votos, lo que los cabecillas de la banda consideran «otro» fracaso del «proceso» que se les prometió durante la anterior legislatura y por el que anunciaron el «cese armado definitivo».

Según las citadas fuentes, los 21 escaños obtenidos por EH-Bildu, que tanta indignación han causado entre la mayoría de los españoles, son considerados como un fracaso por los sectores más radicales del «complejo ETA» (que agrupa a la banda y a las organizaciones de su entramado). Por un lado, no pueden condicionar la actividad parlamentaria del PNV, que puede hacer literalmente lo que quiera en la legislatura, y demuestran, además, que la estrategia seguida por los actuales responsables de Batasuna, con Arnaldo Otegui (aunque esté en la cárcel), Rufi Echevarría y Rafael Díez Usabiaga (también en prisión), no es la adecuada.

El asunto de los presos no avanza y, por lo que respecta a a la negociación con el Gobierno, asunto de la máxima prioridad para ETA, se ha convertido en una quimera. Cuanto más lo pide, mayor es la negativa del Ejecutivo. Esto, vienen a decir los cabecillas de la banda, no es lo que se nos prometió durante la anterior legislatura cuando estábamos en pleno «proceso» con socialistas y nacionalistas, y así no se puede seguir.

Ante esta situación, la decisión, según las fuentes consultadas, es, de momento, el endurecimiento de las posturas de Batasuna y reforzar la presión en la calle; y, si no se consiguen resultados, adoptar medidas más contundentes.

Los expertos recuerdan los documentos de ETA en los que se basaba el «proceso», y en los que se indicaba que la «alianza (Batasuna en sus variadas marcas electorales) trabajará la independencia y la referencia del nacimiento del Estado vasco. La alianza independentista es el motor para la nueva hegemonía del alcance estratégico y nacionalista del proceso (vía de presión y contradicción al PNV)». O lo que es lo mismo: van a utilizar la presión popular contra el PNV, que va a detentar el Gobierno vasco, y, por extensión, contra el Ejecutivo de Rajoy.

Las fuentes consultadas llaman la atención sobre el papel que pueda jugar la Ertzaintza, que va a volver ser mandada por el PNV, ante situaciones de presión y movilizaciones callejeras, ya que, en el pasado, cuando los nacionalistas estaban en el poder, su actuación dejó mucho que desear.

En esos documentos estratégicos también se hacía referencia a la utilización de la presión internacional, a través de «mediadores» y «verificadores», para el logro de los fines independentistas.

 

Los últimos arrestos
Las detenciones de Izaskun Lesaka, jefa del aparato militar, y de Aurore Martin, dirigente batasuna en Francia, no han sido vistas con buenos ojos por parte de la izquierda abertzale. Joseba Permach criticó ayer la detención de Lesaka y aseguró que tanto España y Francia continúan hablando «el lenguaje de la violencia» y «carecen de voluntad política».