España líder en el reciclaje de automóviles

En el marco del Salón de la Recuperación y el Reciclaje de Ifema, una parte importante de los expositores están dedicados a la retirada de la circulación de los vehículos y la posterior recuperación de la mayoría de sus componentes. Gracias a las nuevas técnicas aplicadas al proceso se evitan a la atmosfera casi un millón de toneladas de CO2 al año.España se sitúa como país referente internacional en este sector, puesto que actualmente gestiona los vehículos a través de una red de desguaces y plantas fragmentadoras donde se recupera casi el 87 por ciento del peso total de un coche, lo que supone estar dos puntos por encima de lo fijado en la normativa europea. Tanto es así, que según Alicia García-Franco, directora general de la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje, «hemos logrado que el valor material del coche financie su coste de reciclado, evitando que el proceso repercuta en las finanzas de los ciudadanos».En el proceso de recuperación de componentes de un vehículo, la mayoría de ellos son muy tóxicos, se extraen principalmente unos 650 kilogramos de acero para la fabricación de nuevas piezas y unos 45 kilos de aluminio, que después sirven para fabricar nuevos coches. Si tenemos en cuenta que al año se desmatriculan alrededor de un millón de turismos, sólo las empresas que están presentes en Ifema evitan anualmente la emisión de 985.000 toneladas de dióxido de carbono. Comparativamente es tanto como el volumen que emiten más de 111.000 españoles en un año.En cuanto a la reutilización de los neumáticos, España procesa 314.000 toneladas, diez puntos más que la Unión Europea. Cuando las ruedas se cambian por otras nuevas, no quiere decir que se termine ahí su vida útil.

Las otras vidas de un neumáticoDos de cada diez neumáticos se vuelven a usar si la cubierta lo permite. Un 12 por ciento se recauchuta y se utiliza después para fabricar suelos elásticos prefabricados en forma de baldosas, planchas o rollos, pavimentos deportivos, parques infantiles, el relleno de los campos de césped artificial o para mejorar la calidad de las mezclas asfálticas. Incluso se trata de un material excelente porque es aislante, tanto térmico como acústico. Y el resto se transforma en combustible alternativo para uso en cementeras. Todo ello convierte al reciclado de los neumáticos en una alternativa buena, útil y muy eficiente con el medio ambiente, para dar salida al volumen anual de ruedas fuera de uso que genera España cada año.