El Gobierno no flexibilizará el déficit autonómico

MADRID- El Gobierno dará el jueves otro empujón a las comunidades autónomas para que sigan ajustando sus presupuestos y reduciendo gasto público. El orden del día de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) tendrá como sexto punto el seguimiento de la ejecución de plan de ajuste que se comprometieron a aplicar en el último CPFF. Y si de aquí al jueves el Ejecutivo no recibe la respuesta que ha exigido a unas cuantas comunidades, entonces llegará el primer aviso oficial para poner en marcha el plan de sanciones previsto en la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que, en último término, de no haber rectificación, prevé la intervención de esa autonomía.

El ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas no está satisfecho con los «deberes» que están haciendo todas las comunidades para cumplir con el objetivo de déficit. Hay falta de colaboración por parte de algunas, como, por ejemplo, la Junta de Andalucía, que se ha negado a facilitar los datos de sus empleados públicos con excusas burocráticas como la de que no cumplen los requisitos de los formularios. Y tampoco convencen las explicaciones y la evolución de algunos planes presupuestarios. En la reunión del CPFF estará presente, como siempre, la Intervención General del Estado, quien ha señalado las comunidades que se desvían de los objetivos. Oficialmente el Gobierno no coloca a ninguna en la lista de más problemáticas, pero oficiosamente se siguen manejando los nombres de Cataluña, Valencia, Andalucía... Y otras también bajo gobierno popular como Murcia o Castilla-La Mancha, quien, pese a su desequilibrio, ha aplicado la menor de las subidas posible de tasas universitarias.

En vísperas de la cumbre autonómica, la Junta de Andalucía cargó ayer con virulencia contra el Gobierno central y se desmarcó del reparto de déficit entre Estado y comunidades. No fue la única, porque también por esa senda se han echado otras como Cataluña. Las presiones autonómicas se multiplican, pero este jueves será también ocasión para que el Gobierno solemnice su negativa a flexibilizar o relajar el objetivo de déficit fijado para este año para las comunidades, con independencia de que Bruselas haya aceptado dar un año de prórroga a España para que corrija su déficit excesivo y lo sitúe por debajo del 3 por ciento por la severa recesión.

Pese a ese margen el Gobierno está decidido a redoblar su presión para que las autonomías no se salgan este año del 1,5 por ciento de déficit. En 2011, ellas fueron las principales responsables de que el Estado español se desviara de su compromiso del 6 por ciento, y el último mensaje que el Ejecutivo quiere trasladar en estos momentos a Bruselas es el de que deja de apretar a las regiones para que restrinjan su gasto. Además, las comunidades tienen que ajustarse a ese 1,5 por ciento porque en los mercados no podrían financiar un déficit mayor: de hecho, algunas están ya en la práctica fuera de los mercados por el alto coste que tienen que pagar por su deuda. Habrá un mecanismo de ayuda para esa deuda autonómica, pero no entra en el orden del día del CPFF de mañana.

Según el documento que se ha trasladado a los consejeros autonómicos, en esa agenda está la fijación del techo de gasto para 2013, dentro de los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública para 2013-2015.

Además del examen del grado de cumplimiento del objetivo de estabilidad presupuestaria fijado para 2012 –el Ejecutivo está habilitado para hacer una revisión mensual–, y del seguimiento muy riguroso, y amonestación en su caso, respecto al compromiso autonómico de eliminar empresas y entes públicos.

Duran quiere autonomía sólo para Cataluña, País Vasco y Galicia
El portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Duran Lleida, sugirió ayer «reconducir» la actual organización territorial del Estado, conservando sólo la autonomía para Cataluña, País Vasco y Galicia, y planteando un cierto «grado de descentralización» para el resto de comunidades. En declaraciones a Catalunya Ràdio, Duran afirmó que «esa gente que se le cae la baba al hablar del Estado le haría un gran favor a España si la recondujese desde la perspectiva autonómica». Según Duran, en estas «tres naciones con lengua y cultura propias» sí está justificada una televisión autonómica, porque puede servir para asegurar una mínima presencia de estas lenguas cooficiales en televisión, frente a una abrumadora mayoría de canales en castellano. Pero, a su juicio, «no tiene sentido tener 17 televisiones autonómicas»: «¿Por qué una comunidad como Madrid tiene una televisión autonómica con gasto público? Y el resto de comunidades con televisiones con lengua castellana, ¿para qué? ¿Para que su presidente salga más en televisión?», se preguntó. Duran vaticinó que ni PP ni PSOE «afrontarán el problema», porque hay demasiado interés «clientelar».