Evolución estética y mejora ecológica

MADRID- Un nuevo motor con un consumo difícil de igualar, un diseño más atractivo y la exclusividad de tener un coche poco común son parte de la oferta del nuevo Jaguar XF, una berlina de alta representación que, con su nuevo motor diésel 2,2, mantiene las propiedades de la marca pero uniendo además la economía de mantenimiento.

El XF es una berlina al estilo clásico, a pesar de su diseño moderno. Es decir, cuatro puertas y un buen maletero. Pero para diferenciarlo, para darle un sentido único en su segmento, el nuevo XF presenta una buena dosis de elegancia, modernidad y deportividad, que son los tres puntos que han diferenciado históricamente a esta marca de sus competidores. El XF basa principalmente su imagen exterior en unos nuevos grupos ópticos, que ahora se presentan más afilados en la parte delantera, y con mayor superficie en la trasera, ya que, como parte integral del diseño, envuelven por completo la línea cromada del maletero, dando así una pincelada al clasicismo. El resto de cambios estéticos son menores pero relevantes en el conjunto de la carrocería, y se concentran en unas nuevas entradas de aire, parecidas a branquias, en la parte baja de los laterales delanteros y nuevos espejos retrovisores. Todo ello hace que mejore el aspecto en su conjunto.

En el interior no se aprecian grandes cambios respecto al modelo anterior. Eso sí, se han actualizado todos los elementos de servicio como los botones del volante y la consola central sencillamente para actualizarlos. Sí que es destacable dentro del habitáculo la instalación de unos nuevos asientos mucho más confortables que en la versión anterior. Son ahora algo más blandos, lo que favorece un mayor nivel de confort tanto para las plazas delanteras como para la banqueta posterior.

El más acertado
Por lo que se refiere al apartado motores, Jaguar ha incluido en su XF una larga lista de posibilidades, principalmente en la alternativa diésel. Así, por ejemplo, el 2,2 de cuatro cilindros y 190 caballos de potencia nos parece, tras haberlo conducido durante muchos kilómetros, el más acertado y racional. La fábrica ha comunicado un consumo de sólo 4,5 litros a los 100 kilómetros, una cantidad que resulta difícil de igualar en este segmento.

Este motor va unido a una caja de cambios automática de ocho velocidades, auténtica novedad de producción, que sustituye a la anterior, de solamente seis marchas. Una caja verdaderamente eficaz y que no sirve únicamente para hacer descender los niveles de consumo y emisiones a la atmósfera, sino que además ofrece unas prestaciones más deportivas al tener las relaciones de cambio más escalonadas.

En las versiones de gasolina, Jaguar ofrece sobre este mismo modelo tres versiones de motores V8, dos de ellas con 385 caballos de potencia, y una turbo denominada «Supercharged», que eleva su rendimiento hasta los 510 caballos. Un coche con prestaciones casi de carreras.

Jaguar xf 2,2 D
Cilindrada: 2.179cc
Potencia: 190cv
Vel. máxima: 225Km/h
Acelerac. 0-100: 8,5s
Peso: 1.780 Kg.
Capac. depósito: 70 l.
Dimensiones: 4,96/1,87/1,46m.
Plazas: 5
Tracción: Delantera
Cambio: Autom. 8 velocid.
Capac. maletero: 500 l
Consumo medio: 5,4 l.
Precio: 45.900 euros