La Alpujarra puerto de mar

Es uno de los grandes de la capital, un clásico que nunca falla en el que no cabe la transgresión culinaria. La dejamos para otro día, porque aquí a lo que se viene es a saborear la deliciosa gastronomía andaluza de siempre, aligerada y repleta de sabores, texturas y elegancia. La Alpujarra posee una modesta decoración sureña con la que no pretende llamar la atención para sí hacerlo por su excelsa materia prima, detalle por el que es importante reservar. Nada más entrar, unas mesitas junto a la barra resultan perfectas para rendir culto al arte del picoteo. Hay vinos y champanes por copas y también cañas bien tiradas para acompañar la mejor fritura de Madrid. Presumen de servir unos boquerones inigualables, fama que se apodera también de los calamares y salmonetes.

Aceitunas de Jaén
Para abrir boca, también suena de boca de los camareros unas ricas habitas salteadas con chopitos y cebolla caramelizada, un bocado tan clásico como el flamenquín de presa al Pedro Ximénez. No menos apetecibles son los guisos de la casa (fabada con pulpo y bacalao...), una opción asequible que ronda los 15 euros para calentar el cuerpo. Ya en el comedor, llegan a la mesa unas aceitunas de Jaén, mis preferidas, y una cesta de pan para tomar con tomate y el aceite de la taberna (Mi aceituna picual, del cortijo Berbe Bajo de Granada). Entre los entrantes, unos ricos chanquetes –no sé de dónde proceden, pero los tienen– con huevo frito, que los baña de sabor, y la morcilla con pimientos asados. Tampoco falta la mojama de Huelva, para quien añore este bocado lejos de su tierra, ni el marisco (carabineros a la plancha, berberechos...), porque este establecimiento es uno de los mejores puertos de Madrid, ya que al mar consagran sus especialidades, entre ellas, la lubina a la sal, suave y a la vez sabrosa y tierna, una de las mejores que he probado, que el camarero trae a la mesa junto a un recipiente con mayonesa, salsa rosa y otra elaborada con aceite, ajo y perejil. Un sacrilegio, ya que lo suyo es disfrutar este pescado cuanto más natural, mejor. Dorada y pargo a la sal, rape y lenguado a la parrilla, lomo de merluza con almejas y chipirones con pisto son otros platos más que recomendables. Para los carnívoros, preparan estofado de gamo y un solomillo ibérico con salsa de chalotas y manzana que se cuela entre las sugerencias del día. De postre, un dulce de chocolate y mango. En cuanto al precio, algo alto, pero el buen producto se paga.

Dirección: C/ Plaza del Perú, 4. Madrid.
tel.: 91 345 50 12.
precio medio: 50 euros.
plato estrella: la lubina.
Tarjetas: admite todas.
Días de cierre: ninguno.