Cataluña

El Primavera acaba en gran fiesta

El Primavera Sound más masivo de toda la historia concluyó su X edición con un canto hedonista y festivo.

El efectivo espectáculo de Pet Shop Boys encandiló al público
El efectivo espectáculo de Pet Shop Boys encandiló al públicolarazon

BARCELONA- Cámara, luces, acción... La escena es la siguiente. Dos hombres de 50 años interpretan «hits» de los 80 delante de más de 30.000 personas y todo el mundo les corea, baila y es feliz. Hay mucho color, bailarines, baños de confetti y nadie se lo quiere perder. No parece una gran historia, es verdad, salvo si estás entre el público. El concierto de Pet Shop Boys que cerró el festival Primavera Sound fue una especia de «Avatar», una gran maravilla de golpes de efecto, con un milimetrado gusto comercial. Eso sí, sin argumento, ni grandes aportaciones a la historia de la música, pero desde cuándo los historiadores son un buen plan para el sábado noche. Por eso Neil Tennant y Chris Lowe son más populares que Suetonio o Paul Preston.

Futuro prometedor De «It's a sin» a «Go West», de «Left to my own divices» a «West end Girls», los londinenses repasaron lo mejor de su trayectoria en la misma gira que ya les llevó el año pasado al Poble Espanyol, pero crearon la fiesta perfecta para el Primavera Sound más popular y masivo de su historia.Otros británicos, héroes de los 90 como Charlatans y Orbital, no tuvieron tanta suerte con su revisión de su pequeña historia musical. Los primeros recuperaron su primer disco, «Some friendly», pero sonaron desfasados y anacrónicos. Tim Burguess debe ser como Dorian Grey, él no envejece pero su música sí. Por su parte, Orbital no consiguió despertar mayor entusiasmo.La jornada empezó bien con la fragilidad física e intensidad emocional de Atlas Sound, el proyecto en solitario de Bradford Cox, líder de Deerhunter, que hipnotizó a los asistentes con su psicodelia contenida y melódica. También encandiló la fanfarria melodramática y grandilocuente de Florence and the Machine, que apareció como una hada, toda vestida de blanco, con varita y todo, aunque luego resultó que era una baqueta de batería, pero para qué romper la ilusión. Nada sobresaliente, pero correcto.Del resto, Grizzly Bear tocaron bajo mínimos y no consiguieron engrandecer en un gran escenario los múltiples matices de sus complejas canciones. Dum Dum Grils demostraron que son una apuesta firme para la nueva gran banda de mujeres y The Drums todavía tienen mucho hasta ser algo más que una banda mona y graciosa. En definitiva, el Primavera Sound de los records ya se ha situado en la «pole» de los festivales de verano. Ahora comienza la carrera.

¿Es un festival estratégico?La nueva zona Pro ha sido otro de los éxitos del Primavera, potenciando lo que ya era evidente, el carácter casi de mercado que ha ido cogiendo con los años. Se ha convertido en un gran escaparate de grupos nacionales en el extranjero. La Generalitat, mientras tanto, sigue pensando que no es un festival estratégico y no ofrece ayudas. La organización negó el sábado que la Generalitat les hubiese ofrecido hacer un escenario de artistas catalanes, como se había publicado. ¿Será sentimiento de culpa de Tresserras? Todavía no es tarde para subsanar el error.