Córdoba

Guerra «dixit»

La Razón
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No sé si debo preocuparme, o no. El caso es que coincido con lo expresado por Alfonso Guerra a propósito de la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Cataluña. «Es extraño que Montilla diga a la vez que se salva el 95 por ciento del Estatuto y pida que los ciudadanos se manifiesten», ha declarado de forma tajante el que fue vicepresidente del Gobierno con Felipe González. Guerra también negoció en su día la actual Constitución con Fernando Abril Martorell, este último por la UCD, y ambos tuvieron un gran protagonismo en la redacción de los primeros Estatutos del País Vasco y de Cataluña, textos que se prepararon de forma muy discreta en los contactos y reuniones que tuvieron lugar por esos mismos tiempos en el Castillo de Arévalo (Ávila). Sirva esto para dejar claro que Guerra sabe de lo que está hablando cuando hace esas declaraciones. Supongo que, si ha dicho esto en público, en privado se habrá explayado todavía más. Y es que, simplemente desde el sentido común, resulta muy difícil de entender lo de Montilla. Otro tanto se puede decir de las declaraciones hechas por la «vice» de la Vega y por Leire Pajín, que tampoco concuerdan mucho con las manifestaciones del «president» nacido en Iznájar (Córdoba). La primera anunció que con la sentencia «se ha reforzado el pacto político que estaba detrás del Estatuto». Mientras tanto, Montilla habló de trasladar al resto de España «la indignación colectiva que provoca la sentencia». No sé si de verdad se creen lo que dicen, o voy a tener que pensar que están haciendo teatro y que se han repartido los papeles. En cualquier caso produce un poco de sonrojo.