Educación acusa a UGT de falsear las cifras sobre la ausencia de sustitutos

VALENCIA- Ellos mismos se contradicen. Si fuera cierto que todos los escolares valencianos pierden de media entre seis y ocho horas de clase cada semana por no tener profesor, tal y como aseguraron desde la Federación de Trabajadores de la Enseñanza FETE-UGT, esto se traduciría en más de 5.000 maestros y profesores de baja.

Así lo aseguraron ayer fuentes consultadas por LA RAZÓN, quienes pusieron en tela de juicio unas manifestaciones que afectarían a toda la comunidad educativa valenciana y en las que se afirma que un niño valenciano «está obligado a perder diez días lectivos por la falta de sustituto».

Este escalofriante dato, resultado de calcular estas horas de docencia perdidas entre los más 780.000 escolares de la Comunitat, no refleja la realidad y pone en mal lugar a unos sindicatos que siempre han reivindicado que las bajas de su sector están justificadas. Es más, según las cifras del pasado mes de septiembre, 1.146 docentes se acogieron a su derecho a solicitar una baja laboral, unos datos que cuadruplicaban a los del pasado mes de agosto pero que, en ningún caso, pueden llegar a los 5.000 profesores ausentes.

Además, se exige a la Conselleria que se encuentren sustitutos lo antes posible. Sin embargo, la ley establecida por el Ministerio de Educación refleja que han de pasar diez días para que se pueda contratar a un nuevo docente.

Finalmente, concluyeron en que, como «tienen un horario lectivo sobrecargado» y «grupos de 30 o 40 alumnos» -un hecho muy complicado ya que en la Comunitat no se ha llegado al tope en muchas escuelas- no pueden tender a las necesidades educativas de los escolares valencianos.

Los padres animan a la huelga
La Confederación Gonzalo Anaya de asociaciones de padres de alumnos (APAS) de la Comunitat Valenciana pidió ayer a las familias que secunden la huelga convocada por el Sindicato de Estudiantes para el próximo jueves y que no lleven a sus hijos al colegio ese día.

Esta asociación, de la mano de varios sindicatos de Educación valencianos cree que es necesaria una actuación conjunta frente a «la grave situación actual de recortes y desmantelamiento» que está sufriendo la educación.