Esperando a Torres

Fernando Torres cumplió ayer dos años, pero no pudo celebrarlo como quería. Porque Fernando Torres dejó de ser él para convertirse en leyenda el 29 de junio de 2008. El autor del gol ante Alemania. La leyenda sigue viva, pero «El Niño» todavía no es «El Niño». Le falta velocidad y se le escaparon algunos pases en profundidad de los que le dieron la gloria y ahora sólo muestran sus carencias. Es una cuestión de ritmo, no de cualidades. Fernando ha basado su éxito en unas capacidades físicas portentosas, en su zancada y en su facilidad para llegar a las posiciones de remate. Pero ahora se encuentra en una situación muy similar a la pretemporada de cualquiera de sus compañeros.Después de dos meses parado, Vicente del Bosque le esperó para que llegara a tiempo al Mundial. Era una cuestión de fidelidad, de respeto al grupo y al héroe de la última Eurocopa. España se ha basado en la unión del grupo y el técnico no quería romperla antes de llegar al acontecimiento decisivo.Del Bosque es consciente de que para el juego de toque que llevó a la selección al éxito, a veces sobra un delantero. Pero su idea es que Torres ayuda a fijar a las defensas y a abrir huecos para las llegadas de Villa. Como sucedió en el primer gol contra Chile.Torres, ayer, también ocupó la banda, igual que Villa, para dejar espacio y que entraran Iniesta y Xavi por el centro. Desde la derecha, el «9» intentaba llegar con diagonales hasta la portería. Tenía la intención y las ganas, pero le faltaba la velocidad.Fernando acabó agotado después de pelearse con la defensa portuguesa antes de ser sustituido por Fernando Llorente. Mucho más fresco, y mucho más agotados los centrales cuando salió el jugador del Athletic Club. No tardó Llorente en «enganchar» el primer remate de cabeza. Un centro desde la derecha lo mandó a las manos de Eduardo. Ya había dado más problemas al guardameta portugués que el jugador del Liverpool.Pero «el otro Fernando» se aprovechó del trabajo de Torres. Algo parecido a lo que hacía Clemente cuando utilizaba a Julio Salinas para desgastar a las defensas contrarias. Javi lo hacía por una cuestón de fe y para que los «buenos» entraran al campo con los defensas aburridos de pegarse con Julio. Vicente del Bosque lo hace por una cuestión de necesidad. Torres no está para resolver los encuentros en el segundo tiempo. Sólo por carencias físicas.Pero España y Vicente, confían en las tradiciones, en que España siempre ha ganado campeonatos con goles de Torres. Lo hizo en Europa con la sub ‘17, la sub ‘19 y la absoluta. Le falta conquistar el mundo con los mayores.