País Vasco

De «testaferro» de ETA al éxito en las urnas

La Razón
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Madrid- De «mero testaferro» de ETA a segunda fuerza política del País Vasco. En apenas año y medio, Bildu ha pasado de ver cómo el Tribunal Supremo anulaba todas sus candidaturas a las elecciones municipales de mayo de 2011 a irrumpir en el Parlamento de Vitoria con 21 diputados, un resultado histórico para la izquierda abertzale que ha devuelto a las formaciones nacionalistas la hegemonía en la Cámara vasca.

l Los informes policiales señalaron a Bildu como heredera de la banda terrorista y tanto la Fiscalía como la Abogacía del Estado coincidían en que la coalición era el «plan B» de ETA, tras el revés de Sortu, para garantizar su presencia en los ayuntamientos.

l El Supremo, muy dividido, ratificó esa impresión y calificó la iniciativa abertzale de «cauce simulado y fraudulento para soslayar la ilegalización judicial del brazo político de ETA y así permitir el acceso de Batasuna/ETA a las instituciones representativas». Los nueve magistrados que respaldaron la sentencia (otros siete se opusieron a la anulación de las 254 listas de Bildu) alertaron de las consecuencias que acarrearía que los concejales de la coalición pudiesen acceder a la información de los censos para «establecer una línea de gobierno favorecedora de los fines terroristas de ETA». Del mismo modo, avisaron de que fue la banda terrorista quien confeccionó las listas y de que el rechazo a la violencia de sus candidatos era meramente cosmético.

l Sin embargo, el Tribunal Constitucional decidió una semana después, en una reñida deliberación (seis votos frente a cinco), permitir la presencia en las urnas de Bildu, reprochando al Supremo que hubiese convertido «una simple sospecha» (la vinculación con ETA de la coalición abertzale, que juzgaba «no acreditada») «en argumento jurídico aceptable».