Grupos

Para qué van a estudiar

La Razón
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No voy a abrumarles con datos porque ya lo han hecho mis compañeros de redacción. Pero sí subrayo cómo el contexto social, económico y cultural afecta en las expectativas educativas del alumno. Sólo hay que ver cómo está el patio para entenderlo. ¿Para qué van a estudiar si ven como la misma ministra de Sanidad, que propone cargarse la presunción de inocencia, aprovecha su cargo para pasar un fin de semana en un lugar que no le toca y luego presenta una factura que si la presentamos cualquier mortal a un inspector de Hacienda nos destierra a Guantánamo? Para qué van a formarse si observan cómo un grupo de sátrapas, ocultos tras el disfraz de intelectuales y artistas, a los que escuchan, ya no cantar, sino dar lecciones de todo tipo, especialmente a los que ellos llaman fascistas por el simple hecho de no pensar como ellos se llenan supuestamente los bolsillos con el trabajo de otros. Para qué van a esforzarse si ven cómo personajillos de toda índole se forran acudiendo a los platós de la televisión basura sin hacer nada excepto calumniar. Para qué molestarse si ven cómo mienten quienes les representan, cómo dicen que tienen la solución a la crisis después de hacer dos legislaturas negándola, si ven cómo una experta en flamenco que llegó a ministra para hacerse especialista en despropósitos lingüísticos y de género intenta asegurarse sus lentejas hipotecando aún más al país, o cómo un ex ministro de Exteriores anuncia con toda la desfachatez del mundo que si le dan un nuevo cargo oficial acabará con el hambre en el mundo,… ¿Y todavía quieren que estudien?. Alguien tendrá que explicárseles para qué.