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Primer censo para la Cañada Real

Se empieza a hacer realidad la ley de la Cañada Real Galiana, que fue aprobada este mismo año en la Asamblea. El Ayuntamiento de Madrid dio el segundo paso de este proceso, que consiste en elaborar un censo de las personas que viven en cada terreno del poblado chabolista más grande de Europa.

Desde el 1 de junio un equipo de 20 personas recorre las calles de la Cañada para obtener los datos
Desde el 1 de junio un equipo de 20 personas recorre las calles de la Cañada para obtener los datoslarazon

Desde el 1 de junio, un equipo formado por 20 personas recorre la vía pecuaria en el término municipal que corresponde a la ciudad de Madrid, con el fin de localizar y censar a sus habitantes. De esta forma se empieza a resolver un conflicto que remite a más de 50 años, cuando se formaron los asentamientos. En 2009, las administraciones competentes (Delegación, Comunidad y ayuntamientos de Madrid, Rivas-Vaciamadrid y Coslada) firmaron un acuerdo para la futura ley de la Cañada Real y se aprobó el día 10 de marzo del presente año. La Comunidad les dio a los ayuntamientos un plazo de dos años para que presentasen un informe con la solución socio-urbanística que aplicarán a sus respectivos territorios.

La aprobación de la ley supuso la desafectación de la vía pecuaria, por lo que dejó de ser dominio protegido. Ahora, es el turno de los ayuntamientos, que deberán elaborar el censo de sus correspondientes términos municipales en un periodo de seis meses, un trabajo que el Ayuntamiento de Madrid ya comenzó a hacer, según informó el Ejecutivo. La elaboración del censo en cada ayuntamiento facilitará la actuación sobre los terrenos así como la determinación de los usos del suelo. No obstante, el consistorio madrileño recordó que su elaboración no paraliza las actuaciones de disciplina urbanística que estuvieran iniciadas con anterioridad, por lo que se seguirán llevando a cabo si así lo dictamina un juez.

En estos casos, el Ayuntamiento reiteró que pone a disposición de los afectados todos los recursos sociales, entre ellos, el Samur Social, el acogimiento temporal y la red municipal de servicios sociales. «Uno de los objetivos es fomentar que los habitantes de la Cañada Real acudan a los canales normalizados de integración y de acceso a vivienda protegida», informó a través de un comunicado. Asimismo, mediante el realojo de las familias en exclusión social, se acaba con años de marginación y se permite a las familias iniciar una nueva etapa, en la que seguirán recibiendo el apoyo de las administraciones. No hay que olvidar que en los últimos ocho años se ha hecho un importante esfuerzo económico y se ha realojado a más de 900 familias provenientes de infravivienda horizontal que cumplían con los requisitos de realojo establecidos.