Sevilla- Expiraba el penúltimo debate, en Radio Nacional, sin haberse zafado del guión de siempre, salvo por un desencuentro debido a las intervenciones más largas del candidato del PP, cuando pronunció una última frase, al límite del boletín de noticias, que pedía mármol a gritos. Presumía Juan Espadas de que «debo ser el que menos tiempo he empleado, el más eficiente» cuando se escuchó la voz de Juan Ignacio Zoido, ya sin posibilidad de réplica, para sentenciar: «Pero se le ha olvidado hablar de Sevilla».
Y es que, como hasta ahora, el candidato del PSOE se ocupó de hablar (mal) del PP, intentar desmarcarse de IU y «rescatar» a los descontentos. Y Antonio Rodrigo Torrijos, de hablar (peor) del PP, intentar desmarcarse del PSOE y sacar pecho (otra vez ) por los 140 kilómetros de carril bici. Zoido, por su parte, no empleó descalificaciones –no le salen ni aunque la ocasión lo pida–, se presentó de nuevo como la única alternativa ajena a los pactos y habló de los problemas del sevillano de a pie.
La estrategia de cada uno quedó patente desde sus primeras intervenciones. Así, Espadas afirmó que «me dirijo a los desencantados de la política, a los 200.000 sevillanos que votaron al PSOE en 2008 en generales y autonómicas para que me den su apoyo porque tengo corazón socialista y no quiero para Sevilla un alcalde cuyo modelo sea Aznar». Que viene el coco, versión 2.0. Torrijos aludió a que «lo que más preocupa a IU es el desempleo y la crisis económica derivada de las políticas neoliberales». El titular de la Delegación de Economía y Empleo de una ciudad con 78.000 parados presumiendo, el zorro al cuidado de las ovejas. Y Zoido tampoco se ocultó: «Hablo a todos los sevillanos, sea cual sea su ideología y barrio, que quieran un cambio tranquilo a favor de todos y en contra de nadie. Quiero aire nuevo en el Ayuntamiento».
Y luego, más de lo mismo. El socialista acusó de «copiones» a sus dos adversarios y renegó del «modelo del PP de Madrid, Valencia, Marbella, Fuengirola o Tomares» y el candidato de IU llamó «totalitario, excluyente, intolerante, ‘losetarrota' y relojero» a Zoido, quien dio en la tecla: «Vaya a la calle Nebli a ver qué dicen, pregúntele a los sevillanos si ha mejorado el tráfico...».

Zoido devolverá las fianzas de los parkings no construidos
«Si los vecinos quieren los mil euros eso es lo primero, porque ellos no tienen culpa y son víctimas del incumplimiento de un gobierno absolutamente irresponsable». Juan Ignacio Zoido se comprometió a devolver las fianzas pagadas para obtener plazas en los aparcamientos no construidos y desveló contactos con empresas para desbloquear los proyectos.