Pamplona
Alberto no está solo
La exhibición del Euskaltel y de Movistar, con dos triunfos de etapa cada escuadra, demuestran que el ciclismo español no se acaba en Pinto
¿Estamos en el Giro o en la Vuelta? La pregunta era lógica al mirar a la carretera porque Contador, el hombre que dominaba la carrera, no estaba solo. Nació extraña la carrera, un parto con dolor y muchas lágrimas provocadas por el fallecimiento de Wouter Weylandt camino de la meta de Rapallo en la primera etapa.
El luto convirtió en semiclandestina la victoria de Vicioso. Una señal de lo que esperaba en la carretera. Alegría española. Y dolor, mucho dolor, que volvió a aparecer con la muerte de Xavi Tondo. El Leopard, los compañeros de Weylandt, abandonaron el pelotón después del homenaje que le hicieron en el día después. Pero el Movistar, los compañeros de Tondo, no se fueron. Permanecieron en carrera, convencidos de que el triunfo de Ventoso no era suficiente homenaje para su compañero. La sonrisa de Xavi se merecía más y él no había estado en Italia para defenderse. Ganó Kiryienka el penúltimo día. El homenaje se hizo esperar, pero demostró que merecía la pena que Movistar no se marchara. El bielorruso de Pamplona ofreció el triunfo al cielo. A Tondo.
«Eusebio Unzúe apostó por seguir en el Giro y ha sido la mejor forma de homenajear a Xavi Tondo. Me he encontrado muy bien, a pesar de tener 35 años. Me voy satisfecho, llevo 12 vueltas grandes. Intento dignificar el ciclismo», resumía Pablo Lastras después de cruzar la última meta. Cumplió el objetivo, sólo le faltó acertar con alguna de sus fugas para completar el homenaje. Movistar se exhibió en el esprint de Ventoso y en la aventura de Kiryienka. Euskaltel brilla cuando la carretera se empina. Se exhibió en la montaña con las victorias de Igor Antón y de Mikel Nieve en la etapa que acababa en Gardeccia, la más dura que se ha visto en los últimos tiempos en una gran vuelta. Al equipo vasco sólo le ha faltado resistir en la general.
Igor Antón se vació para ganar en el Zoncolan y perdió al día siguiente el podio que parecía suyo. A todos esos éxitos hay que añadir el dominio de Alberto Contador. Además de la general y dos etapas, se ha llevado la clasificación por puntos y ha quedado segundo en la montaña. Sólo le ha faltado liderar también la clasificación por equipos.
Sonó el himno de Pemán
Tiene una maldición Contador con los himnos. Sonó el danés cuando ganó el Tour de 2009. Ayer fue el de España, pero con letra, el de Pemán, el preconstitucional. Matilde García Duarte, directora general del CSD, interpuso una queja y el Giro no tardó en pedir disculpas por «un error inaceptable con el campeón, el Gobierno y el Estado español».
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